Pérdida ósea peri-implantaria en implantes con diferente tipo de superficie. Estudio retrospectivo a 6 años

  1. GALLEGO LORENZO, LUIS ANGEL
Dirigida por:
  1. Alberto Sicilia Felechosa Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Oviedo

Fecha de defensa: 21 de mayo de 2021

Tribunal:
  1. Luis Manuel Junquera Gutiérrez Presidente/a
  2. José Antonio Vega Álvarez Presidente/a
  3. Isabel Cuesta Fernández Secretario/a
  4. Teresa Cobo Díaz Secretario/a
  5. Pedro José Buitrago Vera Vocal
  6. Laura Ceballos García Vocal
  7. Blas Noguerol Rodríguez Vocal
  8. Mariano Sanz Alonso Vocal
  9. María Victoria Fuentes Fuentes Vocal
  10. David Herrera González Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 651494 DIALNET lock_openRUO editor

Resumen

La peri-implantitis ha sido definida como una enfermedad de origen infeccioso que afecta a los tejidos circundantes a los implantes dentales y cursa con pérdida ósea peri-implantaria. Se ha descrito que puede afectar a un 20% de los implantes y a un 10% de los pacientes y puede relacionarse con factores de riesgo como la enfermedad periodontal preexistente, diabetes, marcadores genéticos, consumo de tabaco, mal control de placa, factores locales, como el escaso tejido queratinizado y crestas alveolares estrechas, así como el tipo de superficie del implante. Objetivo: Analizar retrospectivamente la pérdida ósea interproximal peri-implantaria (CBL) en implantes no idénticos (NI) de hexágono externo, con diferente microtopografía de superficie, colocados en pacientes periodontales que siguen un programa de mantenimiento. Material y métodos: 268 pacientes consecutivos recibieron 755 implantes NI en las regiones molares mandibulares entre 2007 y 2015: 72 mecanizados, 145 híbridos (doble grabado ácido/mecanizados) y 538 anodizados. La CBL fue evaluada anualmente mediante mediciones calibradas en radiografías peri-apicales digitales, con un tiempo de seguimiento de 1 a 6 años. Fue registrado el fracaso/extracción de implantes. Resultados: A los 6 años (53 pacientes) la CBL media fue de 1,34/1,42mm a nivel de paciente/implante (rango: 0-5,2 mm). Se detectó una CBL significativamente superior en los implantes anodizados que en los mecanizados e híbridos (1,92/1,46/1,02 mm) (p<0,01). Los valores máximos de CBL se dieron en 2 implantes anodizados a los 4 años (6,3 y 8,1 mm). Se detectó una CBL ≥2 mm en un 18% de implantes a los 3 años y un 35% a los 6 (p<2,2x1016), siendo esta prevalencia 2,6 veces mayor en los anodizados que en el grupo de híbridos y mecanizados (40%/15,6%, p<0,0094). A los 6 años sólo 25 implantes anodizados presentan CBL ≥3 mm (18%). 6 implantes anodizados (5 pacientes) fueron extraídos entre los 4 y 5 años. Conclusión: Se ha observado una CBL significativamente mayor en los implantes anodizados, respecto a los híbridos y mecanizados, colocados en pacientes periodontales, en la región molar mandibular con un seguimiento de 1 a 6 años.