Marcadores salivales en síndrome de Boca Ardiente

Resumen

Introducción: El Síndrome de Boca Ardiente se caracteriza por síntomas de ardor intraoral sin lesiones clínicas que lo justifiquen. Su etiología sigue siendo desconocida, aunque se relacionan varios factores que pueden actuar como precipitantes de la enfermedad: Estado psicológico, diversas alteraciones nerviosas o factores hormonales. Su tratamiento se sigue investigando, ya que, a pesar de la aplicación de diversas terapias, ninguna ha resultado ser lo suficientemente efectiva en todos los pacientes. Por ello, es evidente la necesidad de encontrar biomarcadores que ayuden a comprender la etiología de esta entidad y permitan la monitorización y seguimiento de estos pacientes. Así mismo, estos biomarcadores pueden ser de utilidad para comprobar la efectividad de nuevas terapias y prevenir la evolución de un brote en una situación de estrés con potencial de desencadenar o empeorar la enfermedad, un ejemplo reciente de ello fue el inicio de la pandemia Covid-19. Objetivos Estudiar los marcadores salivales relacionados con Síndrome de Boca Ardiente. Evaluar respuesta al tratamiento con Melatonina y Clonacepam frente a placebo en SBA. Estudiar la respuesta al estrés durante la pandemia Covid-19 en pacientes que padecen SBA. Material y Método: Para la determinación de biomarcadores salivales se utilizaron muestras de saliva completa no estimulada obtenida con la técnica de drenaje en las que se analizaron 11 marcadores relacionados con inflamación e inmunidad frente a variables clínicas. Del mismo modo, se aplicó la técnica de electroforesis bidimensional para obtener un perfil proteómico de la saliva de 11 pacientes con SBA. La respuesta al tratamiento con Melatonina se evaluó en 23 pacientes frente a un grupo tratado con Clonacepam (n=16) y un grupo Placebo (n= 25). Evaluándose diversas variables clínicas como el grado de ardor antes y después del tratamiento administrado. Para evaluar la afectación de la pandemia en el SBA se incluyeron un total de 40 pacientes en los que se evaluó el cambio de variables clínicas relacionadas con dolor y estado psicológico entes y después del inicio de Covid-19. Resultados: Se encontraron niveles significativamente más altos de: AAS, IgA y MIP-4 y significativamente más bajos de ácido úrico y FRAP en saliva de pacientes con SBA respecto a control, estos marcadores estaban relacionados positivamente con dolor, calidad de vida y ansiedad. En el análisis proteómico se obtuvieron cambios en niveles de AAs, Inmunoglobulinas, inhibidor elastasa leucocitaria y dominio en espiral que contiene proteína 25. Melatonina y Clonacepam obtuvieron diferencias estadísticamente significativas respecto a placebo en la reducción del grado ardor. Los pacientes con SBA mostraron un empeoramiento significativo de variables clínicas de ansiedad y ardor después del inicio de la pandemia. Conclusiones: La saliva podría considerarse un fluido biológico apropiado para el diagnóstico, estudio y control de Síndrome de Boca Ardiente. La Melatonina puede suponer una alternativa de tratamiento en SBA, pero son necesarios más estudios para esclarecer su efectividad respecto a Placebo. La aplicación tópica de Clonacepam sigue siendo una de las primeras elecciones para el tratamiento farmacológico de esta enfermedad. El inicio de la pandemia COVID-19 ha actuado como un desencadenante para el empeoramiento de los patrones de ansiedad, calidad del sueño e intensidad de ardor en pacientes con SBA