La pedagogía con sentido en el pensamiento de Edith Steinsistematización de su legado pedagógico (1926-1933) y su relación con la práctica docente como formadora de maestras en Espira (1923-1931)

  1. Muñoz Arranz, Milagros María
Dirigida por:
  1. David Reyero Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 23 de julio de 2021

Tribunal:
  1. Sara Ramos Zamora Presidenta
  2. Alberto Sánchez Rojo Secretario
  3. Tania Alonso Sáinz Vocal
  4. Conrad Vilanou Torrano Vocal
  5. Bianca Thoilliez Ruano Vocal
Departamento:
  1. Estudios Educativos

Tipo: Tesis

Resumen

Nuestro reto era encontrar una figura relevante que pudiera dar sentido a la Pedagogía, y con ello,aportar una teoría pedagógica con sentido, es decir, aquella que pudiera proponer hoy en día respuestas sobre el por qué y el para qué de la educación. Así llegamos a Edith Stein, mujer judía, filósofa y teóloga. Pero, ¿podríamos definirla también como pedagoga?, ¿podríamos encontrar aportaciones significativas para la Pedagogía del siglo XXI?, ¿dónde reside nuestro interés por esta mujer?, ¿se podría realizar una sistematización de sus bases pedagógicas? Existen diversos estudios sobre el concepto educativo en Edith Stein pero ninguno de ellos ha realizado una sistematización de sus fundamentos pedagógicos. En principio se podría decir que ella tampoco lo hizo. Sin embargo, nos encontramos con un documento clave que podría cambiar esta visión. Se trata de un Esquema pedagógico que elaboró nuestra pedagoga alrededor de 1932 y 1933, es decir, al final de lo que sería la década (1923-1933) dedicada intensamente al ámbito pedagógico. A priori parece que se trataba de un apunte para impartir una conferencia, pero nosotros afirmamos que tenía una mayor trascendencia, de tal forma que dicho documento nos ha servido de guía para ir analizando sus trabajos de este periodo y construir sistemáticamente unos fundamentos pedagógicos steinianos. Con ello queremos demostrar que Edith Stein tenía planificadas unas bases pedagógicas concretas que fue exponiendo en sus intervenciones, que no eran fruto de la improvisación, y que quedaron recogidas en este esquema. Junto a la teoría nos encontramos con la práctica como formadora de futuras maestras. Gracias a los manuscritos de sus clases encontrados en el Archivo de Espira, hemos podido realizar un análisis de su praxis y establecer una vinculación significativa con dicha teoría. Esta tarea nos ha permitido comprobar y corroborar la coherencia mostrada entre ambas. Incluso hemos podido identificar en Edith Stein un estilo docente característico. Buscando las raíces de su interés por la educación, hemos realizado un estudio diacrónico de su biografía en busca de expresiones, decisiones y de cualquier otro vestigio relacionado con el mundo de la educación. Nos hemos encontrado con implicaciones específicas en asociaciones educativas, decisiones personales de formación orientadas explícitamente a una dedicación como educadora, así como una experiencia docente que abarca toda su vida pública y que camina a la par con la investigación filosófica. Mujer y religión son dos ejes que marcan el devenir de su currículo personal, profesional e intelectual. Aunque su atención sobre la situación de las mujeres en la sociedad tuvo su punto de partida en la actuación política, pronto se convenció de que la verdadera ayuda vendría desde la consideración de la educación como herramienta de prevención y lejos de posturas extremistas. La puesta en acción de esta intención queda patente en la década estudiada en la presente investigación (1923-1933) como formadora de maestras y en sus intervenciones teóricas: conferencias, artículos, debates... Por otro lado, siendo judía de nacimiento, abandona la religión en 1906 amparándose en la razón como única fuente donde pretendía encontrar las respuestas sobre qué es la persona. Sin embargo, en 1917, siendo todavía agnóstica declarada, afirmaba que no se podía prescindir del fenómeno religioso, de Dios, si se quiere estudiar la verdad de la persona desde un punto de vista objetivo. Este fue el inicio del camino hasta su conversión al catolicismo en 1921. A lo largo de este tiempo, se fue convirtiendo en una mujer convencida de sus conclusiones sobre el ser humano obtenidas desde la antropología metafísica. Su teoría no se tambaleaba a pesar del nihilismo social y pedagógico que denunciaba, aunque se mostraba abierta a escuchar por lo que se convierte en modelo de respeto y tolerancia. Todo ello nos ha permitido afirmar la presencia de una vocación clara.