Eventos paleolacustres en el este de La Manchalocalización de niveles de travertinos en el entorno del río Cañamares (Carrizosa, Ciudad Real)

  1. I. Campaña 1
  2. Miren del Val 1
  3. Davinia Moreno 1
  4. M. Modesto-Mata 2
  5. C. Álvarez-Posada 1
  6. L. Bermejo 1
  7. A. Suárez-Bilbao 3
  8. P.R. Moya Maleno 4
  9. Daniel García-Martínez 1
  1. 1 Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH)
  2. 2 Equipo de Investigación Primeros Pobladores de Extremadura (EPPEX)
  3. 3 Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea
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    Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea

    Lejona, España

    ROR https://ror.org/000xsnr85

  4. 4 Universidad Complutense de Madrid
    info

    Universidad Complutense de Madrid

    Madrid, España

    ROR 02p0gd045

Revista:
Geotemas (Madrid)

ISSN: 1576-5172

Año de publicación: 2021

Título del ejemplar: X Congreso Geológico de España

Número: 18

Páginas: 245

Tipo: Artículo

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Resumen

El río Cañamares se encuentra en la provincia de Ciudad Real, en el este de la región de La Mancha, dentro del régimen hídrico de la cuenca alta del río Guadiana. Esta región se compone de calizas y dolomías mesozoicas apoyadas sobre facies Keuper, que han permitido el desarrollo de ambientes kársticos. En el margen norte del río Cañamares se encuentra un arroyo denominado Cañada de Pozo Hondo, en el que se localiza la Cueva de los Toriles, una cavidad kárstica con contenido arqueológico. El estudio de esta cavidad y sus alrededores ha permitido localizar 20 afloramientos de travertinos y niveles limosos de posible origen lacustre en la Cañada de Pozo Hondo, alojados en oquedades de la roca dolomítica de la región. Estos niveles sugieren la existencia de una o varias paleo-lagunas similares a las actuales lagunas de Ruidera. En este trabajo se presenta una cartografía preliminar de los travertinos de la Cañada de Pozo Hondo y su posible relación con la existencia de paleo-lagunas en la región. Para ello, se han proyectado en un GIS las coordenadas geográficas de estos afloramientos, lo que ha permitido delimitar la extensión y la distribución altitudinal de las posibles paleo-lagunas. Se ha observado que los afloramientos se agrupan en tres cotas diferentes: en torno a 854 ± 2, 860 ± 2 y 867 ± 3 m.s.n.m, lo que puede indicar la existencia de al menos tres eventos de paleo-lagunas en la región. Estos hallazgos motivan la continuación futura del trabajo, con el fin de esclarecer los procesos y la época de formación de estos depósitos.