Informe del Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) en relación con el impacto de la discapacidad visual en los hábitos alimentarios y en el estado nutricional

  1. Esther López García
  2. Irene Bretón Lesmes
  3. Ángel Gil Izquierdo
  4. Victoria Moreno Arribas
  5. María del Puy Portillo Baquedano
  6. Ana María Rivas Velasco
  7. María Ángeles Matey García
  8. Pilar Montero López
Revista:
Revista del Comité Científico de la AESAN

ISSN: 1885-6586

Año de publicación: 2022

Número: 35

Páginas: 11-36

Tipo: Artículo

Otras publicaciones en: Revista del Comité Científico de la AESAN

Resumen

El término discapacidad visual engloba cualquier tipo de problema visual grave, ocasionado por patologías congénitas, enfermedades crónicas relacionadas con el envejecimiento, accidentes de cualquier tipo o infecciones. Dado el importante impacto de la discapacidad visual en la calidad de vida, parece necesario conocer mejor la evidencia existente sobre el estado nutricional, dieta habitual y comportamientos alimentarios de la población con este tipo de discapacidad. La finalidad última es prevenir los problemas de salud relacionados con una alimentación inadecuada en este colectivo. El Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha realizado una evaluación de las evidencias publicadas sobre el impacto de la discapacidad visual en los hábitos alimentarios y en el estado nutricional, y específicamente, ha examinado la evidencia existente en población española. La literatura científica sobre discapacidad visual, estado nutricional y comportamientos alimentarios es todavía muy escasa. Los estudios se han realizado en poblaciones con tamaños muestrales muy variados, aunque generalmente pequeños, circunscritas a áreas geográficas concretas o grupos de población muy específicos, por lo que en ningún caso han sido representativas de la población de estudio. Los abordajes utilizados han sido muy diferentes, fundamentalmente utilizando diseños cuantitativos transversales, diseños cualitativos y diseños tipo casos y controles. Además, la definición de discapacidad visual utilizada no ha sido homogénea entre estudios por lo que los resultados pueden no ser aplicables a los diferentes grados de discapacidad visual. La evidencia científica en población española es más escasa que la de otros países, sin que se haya realizado ningún estudio comparativo por edades, ni por áreas geográficas. La evidencia científica revisada sugiere que la dieta habitual reportada por las personas con discapacidad visual se aleja de los parámetros considerados saludables, de acuerdo con las guías alimentarias actuales, presentando un mayor riesgo de sufrir obesidad y/o desnutrición, que la población sin discapacidad visual. En cuanto a los hábitos relacionados con la alimentación, la población con discapacidad visual presenta dificultades muy importantes para realizar con normalidad el conjunto de actividades para seguir una alimentación adecuada. Para intentar paliar este problema, las instituciones no gubernamentales dedicadas a apoyar a las personas con discapacidad visual severa o con ceguera, como la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), han desarrollado programas de apoyo que engloban todos los aspectos relacionados con la alimentación: programas de rehabilitación para formación en técnicas culinarias, adaptación de electrodomésticos y utensilios de cocina, acciones de formación y fomento de agrupaciones de afiliados para compartir soluciones. El Comité Científico de la AESAN propone las siguientes actuaciones: 1. Promover la realización de estudios que permitan caracterizar el estado nutricional del colectivo de personas con discapacidad visual leve, severa y ceguera, mediante encuestas nutricionales específicas para este colectivo, y evaluación de criterios diagnósticos de desnutrición. 2. Apoyar la investigación científica para la identificación de barreras que impiden llevar estilos de vida saludables al colectivo con discapacidad visual en España para poder implementar políticas de salud pública que favorezcan el mejor estado de salud posible en esta población. 3. Promover el desarrollo de herramientas de información sobre el contenido nutricional de los alimentos que sean adecuadas para personas con discapacidad visual. 4. Apoyar las medidas de rehabilitación, formación, innovación y otras, puestas en marcha por asociaciones no gubernamentales, como la ONCE, que demuestren eficacia para mejorar la capacidad de las personas con discapacidad visual para alimentarse.