Cambios verticales en los tejidos blandos tras la cirugía ortognática en los pacientes con anomalías dentofaciales

  1. Gil Fernández, Victor Manuel
Dirigida por:
  1. José Luis Cebrián Carretero Director/a
  2. Miguel Burgueño García Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 17 de julio de 2017

Tribunal:
  1. Enrique Gómez Barrena Presidente/a
  2. Dolores Martínez Pérez Secretario/a
  3. Luis Naval Gias Vocal
  4. José Ignacio Salmerón Escobar Vocal
  5. Antonio F. López Sánchez Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Introducción Las deformidades dentofaciales son el resultado de variaciones en la morfología dentoalveolar y esquelética que afectan la función, la estética y el equilibrio facial. En el estudio prequirúrgico de cualquier caso potencial de cirugía ortognática, una de las principales preocupaciones tanto del ortodoncista como del cirujano maxilofacial debe ser el perfil final de las partes blandas y la estética del paciente. Para lograr un perfil óptimo tras la cirugía, se deben evaluar las proporciones verticales del tejido blando, los contornos de los tejidos blandos y las posiciones anteroposteriores relativas de la nariz, los labios y la barbilla. Con este estudio se pretende evaluar la respuesta vertical de los tejidos blandos a la cirugía ortognática en casos de cirugía bimaxilar. La mejora de la apariencia facial es a menudo un factor motivador importante en la búsqueda de tratamiento, por lo tanto, es esencial la capacidad de predecir el resultado del tratamiento. El objetivo principal de este estudio es evaluar y medir la magnitud de los cambios verticales que se producen en los tejidos blandos de la base de la nariz y el tercio inferior de la cara después de la cirugía ortognática, tomando como referencia los cefalogramas en visión lateral, comparando las imágenes de cráneo pre y postoperatorias. Material y métodos Treinta y un pacientes consecutivos (10 varones, 21 mujeres) que se sometieron a cirugía ortognática bimaxilar sin otros procedimientos quirúrgicos como genioplastia, rinoplastia o rellenos de pómulos; fueron seleccionados de los registros de tratamiento de adultos en el Hospital La Paz (edad media = 24,09 años, rango: 18-39 años). Todas las osteotomías maxilares se estabilizaron rígidamente utilizando placas de osteosíntesis y tornillos de titanio. Los criterios de selección fueron: 1. pacientes adultos sin crecimiento, 2. el tratamiento quirúrgico consistió en osteotomía LeFort I y osteotomía bilateral sagital en el Hospital La Paz (años 2005-2015), 3. sin procedimiento quirúrgico adicional como genioplastía o rinoplastia, 4. se realizan cefalometrías laterales estandarizadas que cumplan los siguientes criterios (una radiografía prequirúrgica tomada en la primera semana de la cirugía, una radiografía postoperatoria tomada un mínimo de 6 meses después de la cirugía, radiografías tomadas en relación céntrica con los labios en reposo y posición natural de la cabeza, todos los puntos de tejido duro y blando son claramente identificables). Para cada paciente se realiza el seguimiento de los registros cefalométricos laterales pre y postratamiento, y se identifican un total de 22 puntos de referencia, consistentes en 12 mediciones de tejidos blandos y 10 mediciones de tejidos duros. Se calculan la media, la desviación estándar y el rango promedio de cada variable en ambos períodos de tiempo. Se asigna un valor positivo a los cambios que se producen en las direcciones anterior o inferior, y un valor negativo a los cambios que ocurren en las direcciones posterior o superior. Se utiliza el test de Wilcoxon y el coeficiente de correlación de Pearson para evaluar las asociaciones entre las variables, considerando un valor de r entre 0,6 y 0,7 como correlación débil, 0,7 a 0,8 una correlación moderada y mayor que 0,8 una correlación fuerte. Resultados Los cambios en el área del punto subnasal presentan ratios de ascenso de 0,62:1 para impactación y 0,35:1 para el avance del maxilar en la cirugía bimaxilar. En el área del labio superior son 0,8:1 y 0,7:1 para la impactación en Ls y Stms respectivamente, mientras que para el avance son la mitad (0,40:1). Los cambios verticales en la mandíbula se producen en el labio inferior con una relación al ascenso del incisivo inferior de 0.97:1, valores similares a los encontrados en B', Pog', Gn' y Me' son 1:1, 0.94:1, 1,07:1 y 0,97:1, respectivamente. Conclusiones Las medidas de correlación más fuerte encontradas son en el maxilar superior en el punto A´ y moderada en Stms, mientras que en la mandíbula encontramos correlaciones muy fuertes en Me´ y Gn´. Las correlaciones de los movimientos verticales son más fuertes en la mandíbula que en el maxilar y con un mayor porcentaje, rondando el 100% del movimiento o incluso moviéndose más en algunos casos el tejido blando que el duro. En los ACPB se produce una disminución de la altura facial total (Gl-Me´) y se disminuye la exposición del Is al impactar el maxilar y al descenderlo se acorta el labio superior. Al retruirlo se produce un aumento del tercio inferior (Sn-Me´) y al avanzarlo se aumenta el gap interlabial y la incompetencia.