Abscesos cerebrales: evolución de aspectos clínico-epidemiológicos, terapéuticos y microbiológicos, y análisis de factores pronósticos

Resumen

INTRODUCCIÓN: Los abscesos cerebrales tienen lugar en relación con múltiples factores predisponentes. La evolución del SIDA y la aplicación de terapias inmunosupresoras en pacientes receptores de trasplantes, han influido considerablemente tanto en el espectro de población afectada como en la prevalencia de los diferentes gérmenes implicados. Por otro lado, existe toda una constelación de factores clínico-epidemiológicos, relacionados entre sí de manera compleja, que subyacen a la aparición y desenlace de los abscesos cerebrales. La introducción de las nuevas técnicas de imagen, la aparición de antibióticos de amplio espectro y el refinamiento de las técnicas neuroquirúrgicas han permitido reducir considerablemente tanto la mortalidad como la probabilidad de secuelas neurológicas en el manejo de esta patología. Sin embargo, según determinados estudios, tras el avance que supuso la introducción de la TCc en la década de 1970, no han tenido lugar nuevos eventos que hayan redundado de manera significativa en una mayor reducción de la mortalidad. En base a estos hechos, se plantea la realización de un análisis pormenorizado acerca de la correlación entre los aspectos clínico-epidemiológicos, radiológicos, terapéuticos, microbiológicos y pronósticos para los abscesos cerebrales, así como de su evolución a lo largo del tiempo. MATERIAL Y MÉTODOS: Se realizó un estudio retrospectivo de casos tratados por abscesos cerebrales en el hospital General Universitario Gregorio Marañón durante el periodo comprendido entre enero de 1980 y diciembre de 2014. Para ello se recogieron datos en relación a factores demográficos, clínico-epidemiológicos, radiológicos, terapéuticos, microbiológicos y de resultado clínico a largo de todo el periodo considerado. Se llevó a cabo un estudio pormenorizado de las eventuales correlaciones existentes entre dichos factores, así como sobre la evolución de los mismos a lo largo del tiempo. Igualmente se trató de identificar a aquellos factores con significación pronóstica y ponderar la influencia de cada uno de ellos respecto al resultado clínico final. Se consideraron estadísticamente significativos aquellos resultados con valores de p < 0,05. RESULTADOS: Se incluyeron un total de 155 casos con abscesos cerebrales. Se hallaron múltiples asociaciones con valor estadístico significativo entre factores clínico-epidemiológicos, radiológicos, terapéuticos y microbiológicos. La evolución de dichos factores entre los periodos 1980-1997 y 1998-2014 consistió en un incremento de los focos de origen dentario y postquirúrgico, en detrimento de aquellos criptogénicos y óticos (p=0,000); un aumento de los abscesos cerebrales producidos mediante vía de diseminación hematógena (p=0,026); un mayor número de casos con comorbilidades de índole diversa (p=0,001); un incremento de la modalidad quirúrgica punción-aspiración con la consiguiente disminución en la práctica de excisiones mediante craneotomía (p=0,037) y, por último, una reducción en la proporción de cultivos estériles (p=0,000), con una mayor frecuencia de cultivos monomicrobianos (p=0,000) y de gérmenes aerobios entre aquellos positivos (p=0,010). No se encontraron diferencias estadísticamente significativas respecto a la evolución de los resultados clínicos entre los dos periodos considerados. El análisis multivariante permitió identificar la presencia de comorbilidades (p=0,019) y el origen fúngico-protozoario (p=0,049) como factores independientes asociados a un resultado clínico desfavorable, encontrándose una tendencia estadística en la asociación entre la realización de excisiones mediante craneotomía y un resultado clínico favorable (p=0,052). CONCLUSIONES: Los aspectos clínico-epidemiológicos, radiológicos, terapéuticos y microbiológicos se encuentran interrelacionados de manera compleja y condicionan la evolución de los abscesos cerebrales. Factores tales como el foco de origen, el mecanismo etiopatogénico, la presencia de comorbilidades, la modalidad de tratamiento quirúrgico realizada y los hallazgos microbiológicos han experimentado cambios sustanciales a lo largo de las últimas décadas. La presencia de comorbilidades y el origen fúngico de los abscesos cerebrales constituyen factores independientes asociados a un incremento del riesgo de sufrir un resultado clínico desfavorable.