Tomás Batuecas Marugán (1893-1972)primer catedrático de química-física en España y químico español de renombre internacional. Una contribución a la historia de la química española

  1. González de Posada, Francisco
Dirigida por:
  1. Antonio Francisco Canales Serrano Director
  2. David Díez Martín Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad de Salamanca

Fecha de defensa: 22 de abril de 2022

Tribunal:
  1. Carlos Seoane Prado Presidente
  2. María Ángeles Castro González Secretario/a
  3. José Cándido Martín Fernández Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

En un contexto cultural en el que habíamos dedicado tantos esfuerzos en la elaboración y difusión de las biografías de los miembros de la que consideramos como ‘Escuela de Cabrera’, equipo de físicos y químicos reunidos en el Laboratorio de Investigaciones Físicas (LIF) de la Junta para Ampliación de Estudios (JAE), se nos presentó la honrosa invitación para dictar una conferencia plenaria en el Congreso de la Sociedad Española de Historia de la Ciencia y de la Técnica que se celebraría en Badajoz 2008. La localización en Extremadura nos sugería que dedicara dicha conferencia a Tomás Batuecas, que probablemente sea el último de aquellos científicos de la Edad de Plata1 que merecieran ser sacados a la luz e incorporados a la Historia de la Ciencia española. Así al menos lo entendí yo y acepté mi propio reto. A modo de recuerdo, por su utilidad como marco para el presente trabajo, parece conveniente citar, desde esta primera página, algunos de los personajes que aparecerán con cierta reiteración en esta tesis a los que hemos dedicado en diversas ocasiones diferentes obras, tales como Blas Cabrera, Ángel del Campo, Enrique Moles, Julio Palacios y Arturo Duperier y conferenciado en numerosas ocasiones sobre ellos, quienes con Miguel Catalán y Tomás Batuecas integran la denominada ‘Escuela de Cabrera’, en tanto que fueron los más significativos de la primera generación, la del LIF, a la que seguiría una segunda integrada en el Instituto Nacional de Física y Química (INFQ). Es de justicia dejar constancia de que en Santiago de Compostela Tomás Batuecas ha sido formalmente reconocido -Hijo Adoptivo, escuela de discípulos y nominación de una calle- y fue aceptablemente conocido y recordado. Pero hacía falta, a nuestro juicio, una doble recuperación de su memoria: primero, en la España toda; y segundo, para la Historia de la Química española. Tarea patriótica y científica, pues, complementaria de las precedentes, que asumimos de nuevo ahora, 2021, con sumo gusto a pesar de los esfuerzos que ello conlleva. Esta ‘Primera Parte. Introducción Marco’ se separa, independiza, de la ‘Segunda Parte. Biografía científica’ con objeto de facilitar, en su caso, la edición de la biografía, sin necesidad de incluir todas las consideraciones propias de una tesis doctoral, con la 1 Por Edad de Plata, en lo que se refiere a la ciencia española, veníamos entendiendo el período aproximado 1910-1936 en el que surge “ciencia institucionalizada”. Escribíamos en 2008: Se encuentra en la imprenta el libro multiautorial El legado filosófico y científico español e iberoamericano del siglo XX en el que por decisión de los coordinadores se amplía el período de la Edad de Plata por el extremo inferior, integrándose en ella Cajal, Torres Quevedo y Menéndez Pelayo. A mí me han concedido el honor de encomendarme algunos capítulos de este nuevo Legado. En 2005 había aparecido El legado filosófico y científico del siglo XX, editorial Cátedra, hoy en su segunda edición, en el que escribimos el capítulo 38 “La ciencia española en el siglo XX”. Véase Garrido et al. (2005) y (2009). esperanza, así, de que pudiera editarse como biografía y lo hicieran la Universidad de Santiago o instituciones de Extremadura. En esta perspectiva de independizar como Primera Parte la estructura usual inicial de las tesis doctorales queda integrada por los siguientes capítulos. Capítulo 1, en el que se trata del objeto y de los objetivos de la tesis, así como de analizar las posibles causas del abandono en que la historia de la ciencia española ha tenido al químico Tomás Batuecas. Capítulo 2, que acoge los ‘Antecedentes’ del Corpus de la tesis, biografía de Batuecas, que, siendo realmente tan escasos, exigen necesarias autocitas, que ofrecen, en términos usualmente positivos, el papel de ‘alforjas del doctorando’ para su enfrentamiento con el objeto y los objetivos de la obra. Citar artículos, documentos y libros de la literatura existente para fundamentar un informe de investigación para su publicación es una práctica necesaria. La inclusión por el autor de citas pertinentes, adecuadas y oportunas le permite situar el trabajo que presenta en el ‘estado de la cuestión’ a la altura del momento de su elaboración. Y las que existan, propias o ajenas, deben ser soportes explícitos de las contribuciones de la tesis. En ocasiones, las autocitas, ‘antecedentes personales’, son especialmente necesarias cuando los trabajos publicados con anterioridad, por el propio autor (sobre todo cuando éste individualmente o el grupo de investigación al que pertenece lleva años investigando y publicando sobre temas próximos al propio de la tesis), son realmente importantes para distinguirlas de lo nuevo, de modo que así, ciertamente, se ofrezca novedad con originalidad. Con el carácter de ‘antecedentes externos’ hay que calificar las recientes infamias ‘galleguistas’ dirigidas a Batuecas, que, actuando en forma cainita, tan propia de los españoles de cualquier región, sirvieron, en un principio de freno a los inicios de esta tesis y finalmente han desempeñado el papel estimulante necesario para su conclusión. En torno a los actos del Día de la Ciencia organizado por la Real Academia Galega de Ciencias en Homenaje a Tomás Batuecas se desató una indocumentada campaña contra la dignidad y el honor del eminente profesor que esperamos recuperar. La Academia y la Universidad, en especial sus Secciones o Facultades de Ciencias, deben, en todo caso, defender la ciencia y no las ideologías del signo que fueren. Capítulo 3, dedicado a recordar el ‘momento científico español, 1775-1825’ tratado por Enrique Moles para denominar como nuevo ‘momento singular de la química española, 1910-1936’, en el que situar la figura de Tomás Batuecas formando parte de la historia de la Química en nuestro país. Capítulo 4, en torno a la Química Física con la consideración de apunte sin pretensiones de otro tipo. No se trata acerca de lo que podría ser o no ser esta disciplina, bien establecida en los planes de estudio y en el ámbito de la investigación científica, sino que, ante el hecho de su existencia, constitución y evolución, sirva para situar en ella los campos concretos a los que dedicó su atención Tomás Batuecas. Capítulo 5, para describir sintéticamente las fuentes de diversos tipos utilizadas y la clásica metodología empleada en este tipo de tesis doctorales. Capítulo 6, finalmente, en el que se reproduce el “Curriculum Vitae" que preparó el propio Batuecas y que sirve como estructura básica para la elaboración del presente trabajo. Y tras esta Introducción Marco se procede en una Segunda Parte al tratamiento usual de las biografías de personajes históricos, mediante la construcción diacrónica de su vida en perspectiva sucesivamente sincrónica con los contextos – circunstancias - en que aquella se fue forjando. Esta Segunda Parte de la tesis constituye el CORPUS propiamente dicho de la misma. En síntesis, se concibe ésta como biografía científica de Batuecas, con la intención de que pueda ser separada con facilidad, por su independencia, de la Primera Parte cuya presentación ahora concluimos, si así se deseara, a efectos de su publicación. Con esas notas introductorias y ante la real ausencia de biografías de Tomás Batuecas Marugán, por sintéticas que fueran, se ha considerado oportuno no sólo destacar su quehacer científico sino establecer el esqueleto biográfico del químico extremeño de modo que esta metafórica anatomía ósea, columna vertebral de datos significativos, se complete con el cuerpo total de don Tomás, que se expondrá al hilo de sus cambiantes circunstancias, de modo que lo fundamental quede en su totalidad recogido aquí.