Diagnóstico genético preimplantatorio (dgp). Juicios éticos emitidos en revistas biomédicas y bioéticasun análisis crítico de los mismos desde la bioética personalista

  1. ARANGO RESTREPO, PABLO
Dirigida por:
  1. Pedro José Sánchez Abad Director/a
  2. Luis Miguel Pastor García Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 19 de noviembre de 2009

Tribunal:
  1. Luis Santamaría Solis Presidente/a
  2. Modesto Ferrer Colomer Secretario/a
  3. Antonio Romero-Hoyuela Vocal
  4. José María Barrio Maestre Vocal
  5. Jose Luis del Barco Collazos Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 108137 DIALNET

Resumen

El diagnóstico prenatal (DPN) ha tenido un desarrollo grande en los últimos 50 años y uno de los adelantos diagnósticos más recientes es el Diagnóstico Genético Preimplantatorio (DGP). Ésta es una técnica que esta actualmente unida a la Fecundación in Vitro (FIV), con ella se puede examinar un embrión de 4 o 5 días con el fin de conocer no solo si es portador de enfermedades, sino de conocer el sexo del embrión, y poder seleccionar también entre los embriones obtenidos con la FIV uno que pueda ser donante de sangre del cordón umbilical con el objeto de que las células madres de éste ayuden a tratar alguna enfermedad de un hermano enfermo (bebé medicamento); otro de los objetivos de la técnica- según sus promotores- es el de ayudar a mejorar los resultados de la FIV, especialmente cuando se trata de mujeres mayores de 38 años que quieren engendrar. El objetivo de esta tesis doctoral es en primer lugar profundizar en el conocimiento del estado actual de la técnica del DGP; y en segundo lugar saber cuáles son las cuestiones éticas más tratadas en los artículos de revistas biomédicas y bioéticas, con el fin de hacer una comparación entre ellos y determinar la similitud o discrepancia de los argumentos que se esgrimen en los mismos sobre la licitud o ilicitud del DGP. Por último a la luz de los resultados obtenidos se expone una visión crítica del DGP desde la bioética personalista. Para la realización de la tesis se ha realizado una búsqueda en Medline usando los términos "preimplantation genetic diagnosis" y "ethics", desde enero de 1990 hasta diciembre de 2005. Del listado de artículos obtenidos se eliminaron los eminentemente técnicos. Así se obtuvieron 186 artículos, de los que se consiguió su texto completo. Dentro de éste conjunto de artículos, 151 correspondieron a revistas de carácter biomédico y 35 bioéticas. Una vez estudiados estos artículos con detalle reducimos la muestra para el análisis, conservando 94 artículos de revistas biomédicas (descartamos 57 pues sólo hablaban de aspectos técnicos) y 35 de bioéticas. Se observó que las principales técnicas de laboratorio usadas para el diagnóstico de las células extraídas del embrión son la reacción en cadena de la polimerasa (PCR) y la hibridación in situ fluorescente (FISH), con las que en la actualidad se diagnostican más de un centenar de enfermedades. El DGP tiene una serie de riesgos importantes, tanto para el embrión como para la madre. A estos riesgos hay que añadir otros problemas relacionados con la baja efectividad de la técnica y la gran pérdida de embriones en todo el proceso. Así, se observó que el porcentaje de nacidos vivos por cada ciclo de FIV se sitúa entre un 12% y 17.2% y que hay preocupación en muchos artículos biomédicos y bioéticos por la poca seguridad de la técnica. Además se descartan muchos embriones sanos, que solo son portadores cuando se selecciona el sexo de estos para evitar una enfermedad ligada al cromosoma X, y cuando, al buscar un hermano que pueda donar la sangre de su cordón umbilical se descartan embriones sencillamente porque no son compatibles en sus antígenos de histocompatibilidad (HLA). Los artículos estudiados son de autores de muy variada formación, en ellos analizamos los diferentes aspectos bioéticos que tratan sobre el DGP teniendo en cuenta el año de su aparición así como el país de origen. Se han analizado los juicios bioéticos respecto al DGP tanto en las revistas biomédicas como bioéticas teniendo en cuenta diferentes aspectos como: juicios relativos al embrión, la selección de embriones por el sexo, bebé medicamento, si el autor considera que el DGP es un procedimiento eugenésico o afecta la diversidad genética, relativos a la autonomía de los padres y del embrión, la seguridad de la técnica, si consideran oportuno el argumento bioético de la pendiente deslizante o pendiente resbaladiza, la justicia en la distribución de los recursos o la integridad u honestidad del biomédico. En muchos de los artículos los autores biomédicos y bioéticos indican que el DGP tiene la bondad de ser preferible al aborto pues no se han creado los lazos entre madre e hijo y es un procedimiento de laboratorio. Con respecto a su uso en la selección de sexo en la comunidad bioética hay más resistencia a aceptar esta aplicación del DGP. Por el contrario con respecto al bebé medicamento encontramos mayor proporción de opiniones que están a favor del mismo en las revistas bioéticas. Los argumentos son similares a los de los biomédicos, pero hay algunos propios, como que se debe respetar la autonomía de los padres, que es un triunfo del sentido común, no es un proceso invasivo pues sólo se va a donar sangre, no un órgano sólido; el niño donante se sentirá acompañado por el que se curó y tendrá la satisfacción de haberle ayudado, sin el DGP ese niño posiblemente no hubiera nacido. En relación a la eugenesia la comunidad bioética piensa más que es un procedimiento eugenésico que los autores biomédicos y éstos piensan más que existe el peligro de la pendiente deslizante en comparación con los autores bioéticos. Desde nuestra perspectiva personalista hay que partir, a la hora de dilucidar la eticidad del DGP, de una cuestión previa que es el análisis del estatuto del embrión humano. Pensamos que el embrión preimplantatorio es un individuo de la especie humana y merece todo nuestro respeto. Desde este punto de vista el DGP vulnera la vida humana, somete a graves riesgos al embrión y a la madre. Además el DGP no es una técnica suficientemente probada ni ha sido investigada previamente en animales para descartar posibles complicaciones en su aplicación al ser humano. Esto significa que se está utilizando en los humanos de una manera imprudente y sin respetar las normas que rigen la investigación humana. Esta técnica aplica a la procreación humana criterios de la actividad industrial y la selección de embriones atentando contra la diversidad genética. Pretende erradicar los genes desfavorables lo cual es una utopia, y asume una postura explícita contra las personas enfermas, que incrementa la intolerancia hacia ellos y los considera personas de segunda categoría. Es cierto que una preocupación de los médicos cuando comenzaron la FIV era la de estudiar los problemas de infertilidad para poder solucionarlos en su raíz, pero el DGP nos muestra como la FIV se inclina poco a poco a perfeccionar el producto de su actividad, en cuanto que la selección de embriones que se realiza no solo elimina al enfermo, sino que también tiende a elegir en relación a características genéticas concretas. Así pues, estamos ante una técnica sin finalidad curativa, que necesita de muchos embriones para hacer una selección de uno de ellos sanos, o, discrimina de forma interesada a los embriones según sus características genéticas. Ambas formas de actuar son eugenesia, negativa y positiva, y supone una decisión discriminatoria por la cual a unos se les deja vivir y a otros se les priva del derecho a vivir. En conclusión, de la literatura analizada se desprende que ambos ámbitos el biomédico y el bioético han coadyuvado sinergicamente a impulsar la aceptación social de esta técnica con argumentos muy similares aunque existen discrepancias entre ellos en la valoración de las últimas aplicaciones del DGP estudiadas como son la selección de sexo o el bebé medicamento. Desde la bioética personalista es una técnica que atenta contra la vida, la dignidad humana y de la procreación tal como esta configurada actualmente. De acuerdo con la misma, esta técnica de diagnóstico no debe ser aplicada en los seres humanos mientras no suponga un beneficio para los embriones humanos y deje de ser una sentencia de muerte para muchos de ellos.