Diagnóstico del rechazo agudo del trasplante renal mediante plaquetas autólogas marcadas con In-111-oxina
- Martín Comín, José
Université de défendre: Universitat de Barcelona
Année de défendre: 1989
- Luis Revert Torrellas President
- Ignasi Carrió Gasset Secrétaire
- José Luis Carreras Delgado Rapporteur
- Ferran Fernández Nogués Rapporteur
- Antoni Caralps i Riera Rapporteur
Type: Thèses
Résumé
El objetivo del trabajo es analizar la posible utilidad de la exploración con plaquetas autólogas marcadas con In-111-oxina en el diagnóstico del rechazo agudo del trasplante renal.Se han estudiado 177 pacientes, 52 mujeres y 125 varones, con edades comprendidas entre 14 y 61 años, distribuidos en tres grupos según la inmunosupresión que recibían: Grupo 1 (78 pac.): azatioprina; grupo II (69 pac.): ciclosporina A; y grupo III (40 pac.): ciclosporina A y suero antilinfocítico.Las plaquetas autólogas fueron marcadas con 150 uCi de In-111-oxina. Tras la reinyección de las mismas al paciente se obtenían gammagrafías de 10 minutos de duración del área del injerto y de la fosa iliaca contralateral. La primera gammagrafía se obtenía entre 2 y 4 horas p. i. Y subsiguientemente se obtenían registros diarios hasta el 5º - 6º día. El depósito de plaquetas marcadas en el injerto se valoró mediante el índice de atrapamiento (Ip) que establece relación de actividad entre el injerto y la fosa ilíaca contralateral.En cada grupo se distinguió entre pacientes con injerto funcionante (IF), pacientes con fracaso renal agudo de origen no inmunológico (FRA) principalmente debido a necrosis tubular aguda, y pacientes con rechazo agudo (RA).El diagnóstico se basó en los datos clínicos, bioquímicos, ecográficos, isotópicos (hipuran-I-131) e histológicos.RESULTADOS:Ni en los pacientes con injerto funcionante ni en los pacientes con FRA se observaron depósitos significativos de plaquetas en el área del injerto, el valor medio del Ip fue de 1.1 +/- 0.1 en los pacientes con IF y de 1.0 +/- 0.1 en el FRA.En los pacientes con RA se observó un depósito significativo de plaquetas en el injerto y el iP fue significativamente superior 1.84 +/- 0.5, 1.82+/- 0.29 y 1.57 +/- 0.18 en los grupos I, II y III respectivamente.En 54 de los 109 episodios de RA estudiados la creatininemia se elevó o alcanzó el nivel máximo con posterioridad a la elevación del Ip.Tras el tratamiento del depósito de plaquetas siguió un curso paralelo a la evolución clínica. En los pacientes con buena respuesta terapéutica se observó un descenso significativo del Ip y de la creatininemia coincidiendo con la resolución del episodio.Por el contrario en los pacientes en los que la respuesta al tratamiento fue más lenta o inexistente el Ip no experimentó variaciones significativas y en algunos casos se elevó la creatininemia se comportó de manera similar.También se observaron depósitos de plaquetas en el área del injerto en 13 pacientes con hematoma. Sin embargo los depósitos debidos a esta causa, si bien invalidaron la exploración, en general no condujeron a faltas interpretaciones. La extensión de la actividad, que sobrepasaba los límites renales y la configuración de la misma, que no se correspondiente con la de la silueta renal, permitieron su identificación en todos los casos excepto en uno.La exploración tampoco puede utilizarse en los pacientes portadores de un trasplante renal ortotópico ya que el depósito "normal" de plaquetas en el bazo se superpone con el injerto e impide su valoración.El análisis global del índice de actividad muestra que Ip inferiores a 1.3 sólo se observaron en pacientes sin rechazo. Por el contrario índices superiores o iguales a 1.6 correspondieron en todos los casos excepto 1 a RA (1/78). La zona intermedia correspondiente a Ip de 1.4 y 1.5 tanto correspondió a RA como a ausencia del mismo, especialmente en los pacientes que recibían ciclosporina A.Si el nivel de normalidad se sitúa en cada grupo una desviación estándar por debajo del valor medio encontrado en los pacientes con rechazo, éste es de 1.3, 1.5 y 1.4 para los grupos I, II y III respectivamente, y se observa que el número de falsos positivos y de falsos negativos es muy bajo: 3 y 1 en el grupo I, O y 5 en el grupo II, y 2 y 1 en el grupo 3.La fiabilidad de la exploración para el diagnóstico del rechazo agudo es muy elevada: Sensibilidad 93.4%, especificidad 98.7%, precisión 97.6%, valor predictivo de la exploración positiva 95.3% y valor predictivo de la exploración negativa 98.3%. No se han observado diferencias significativas entre los tres grupos.En resumen: La exploración con plaquetas marcadas con In-111-oxina es útil para el diagnóstico del rechazo agudo del trasplante renal. Índices de atrapamiento inferiores a 1.3 permiten descartar de forma casi absoluta la existencia del rechazo mientras que los índices iguales o superiores a 1.6 permiten diagnosticarlo (en ausencia de hematomas).El depósito de plaquetas y la elevación del índice preceden con frecuencia a la aparición de las manifestaciones clínicas y a la elevación de la creatininemia.Tras la instauración del tratamiento el Ip sigue un curso paralelo a la evolución clínica.Los hematomas invalidan la exploración, pero su forma y extensión distintas a la del riñón permiten su identificación en la mayoría de los casos, no dando lugar a falsos positivos.Le elevada fiabilidad de la exploración hace que sea un método adecuado para el diagnóstico del rechazo agudo de1 trasplante renal heterotópico.