El espacio público como escenario

  1. Díaz Guerrero, Ruth Marcela
Dirigida por:
  1. Josep Muntañola Thornberg Director/a

Universidad de defensa: Universitat Politècnica de Catalunya (UPC)

Fecha de defensa: 22 de junio de 2001

Tribunal:
  1. Magda Saura Carulla Presidente/a
  2. F. Javier Biurrun Secretario/a
  3. Miguel Morey Farré Vocal
  4. Francisco Javier Monedero Isorna Vocal
  5. Jose Luis Pardo Torío Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 84816 DIALNET lock_openTDX editor

Resumen

Los objetivos centrales de este trabajo han sido dos en el ámbito crítico: - Desarrollar un análisis del concepto de espacio y particularmente de espacio público, asociado al ejercicio de proyección arquitectónica y de construcción de la realidad habitable. - Desarrollar un análisis de las maneras de proceder de la arquitectura y particularmente del proyecto arquitectónico con respecto a estas nociones de espacio. A partir de este análisis, la tesis se propuso estudiar una alternativa teórico práctica que permitiera a la arquitectura superar las herramientas con las que se le ha dotado en la actualidad y la instrumentalización técnica a la que parece sometida en su uso. Dentro de la dimensión teórica el trabajo se orientó hacia una re - fundamentación semiótico hermenéutica de la arquitectura y del ejercicio de realización del objeto arquitectónico a partir de la teoría lógica de Ch. S. Peirce; este autor es uno de los pocos que ha desarrollado una propuesta teórica fundada en la imagen y no en la palabra como elemento constitutivo de sentido, por lo tanto, se ofrece a la arquitectura la posibilidad de trabajar desde sus propia especificidad para dar una existencia significativa a una práctica profesional cada vez más compleja. Dentro de la dimensión práctica, la re formulación de la idea de espacio, va de la mano de una comprensión de esta imagen propia de la arquitectura desde el ámbito cinematográfico; esto implicó en primer lugar un estudio de las nociones de cinemático (en movimiento) o fílmico con respecto al espacio, para alcanzar el movimiento propio de la complejidad, pero también, un estudio explicativo de la idea de cinematografía y de las nociones mínimas que la constituyen y sobre las cuales se funda esta nueva comprensión de la realidad. En este punto la propuesta teórica de Peirce es iluminada por la aplicación que hace Gilles Deleuze de la lógica de las imágenes de Peirce. Finalmente, la crítica inicial es superada en el ejercicio de proyección sobre el cual la arquitectura se encuentra con el cine haciendo de todo espacio un espacio exterior, abierto, necesariamente publicable, proyectable y habitable para ser considerado arquitectónico: el espacio se hace público y escénico, a la par que la arquitectura se hace obscena como fundamento de esa nueva realidad que el arquitecto debe proyectar y que debe dejar de ser publicitaria; el cementerio de Igualada es solo un pretexto fílmico arquitectónico para demostrar que todo esto que se dice, no está tan lejos no es tan difícil y que para que el arquitecto actúe cinematográficamente y haga espacio público no ha de hacer películas, solo arquitectura en todo el sentido de la palabra.