Intrusos en la fortaleza menores marroquíes migrantes en la frontera sur de Europa

  1. Jiménez Alvarez, Mercedes G.
Dirigida por:
  1. Liliana Suárez Navaz Director/a
  2. Bernabé López García Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 24 de junio de 2011

Tribunal:
  1. Carlos Giménez Romero Presidente/a
  2. Ángeles Ramírez Secretario/a
  3. Natalia Ribas Mateos Vocal
  4. Francesco Vacchiano Vocal
  5. Elisa García España Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Este trabajo de investigación se centra en la descripción de los procesos de movilidad, autonomía, gobierno y resistencia de adolescentes y jóvenes marroquíes en la Frontera Sur de Europa. He pensado estos conceptos en relación a la migración autónoma de menores marroquíes desde una perspectiva transnacional. Analizo la movilidad infantil en un campo migratorio transnacional, entendiendo éste como una metáfora analítica (Suárez, 2007) que permite, por un lado, profundizar en las formas de gobierno que convierten a estos adolescentes y jóvenes menores de edad en los migrantes más incómodos de la Europa de Schengen, en intrusos en la Europa Fortaleza, y por otro, desvelar cómo estas formas de control pueden llegar a ser interpeladas por estos nuevos sujetos migratorios desde su capacidad de agencia. La hipótesis se cuestiona, desde una perspectiva transnacional y partiendo de entender a los menores marroquíes que migran de forma autónoma como nuevos sujetos migratorios en el campo migratorio transnacional, si desde su capacidad de agencia es posible llegar a una interpelación de las formas de gobierno que se despliegan sobre ellos y qué procesos de sofisticación del control generan estas interpelaciones. El objetivo principal consiste en llevar a cabo un análisis de las formas de gobierno sobre los menores marroquíes que migran de forma autónoma y profundizar en la capacidad de agencia de estos hasta el punto de demostrar que estas formas de gobierno pueden ser interpeladas desde la condición liminal (Vacchiano, 2008) de menor de edad migrante construido como intruso, pero teniendo en cuenta que estas interpelaciones pueden provocar una sofisticación de los procesos de control sobre ellos. Los menores de edad marroquíes que migran de forma autónoma son los protagonistas de este trabajo etnográfico (Arce, 2006a y 2006b; Bargach, 2005, 2006 y 2009; Empez, 2007 y 2008; Giménez y Suárez, 2001; Jiménez, 2003, 2005, 2006a, 2006b y 2007; M¿jit, 2005; Monteros, 2007; UNICEF 2005 y 2007; UNICEF y Alkhaima, 2010; Quiroga, 2003; Suárez, 2004a, 2006; Vacchiano, 2007 y 2008). En esta tesis doctoral nos centraremos etnográficamente en la migración autónoma de los niños, niñas y jóvenes marroquíes. El punto de partida etnográfico será la ciudad de Tánger, entendida esta como ciudad global enmarcada en una región fronteriza donde se plasman de forma paradigmática una serie de procesos globales (Ribas-Mateos, 2005). Sin embargo, también tendremos a otros adolescentes y jóvenes menores de edad procedentes de otros países que llevan a cabo una forma de migración autónoma y también presentes en nuestro campo migratorio transnacional. Me refiero a menores procedentes de África del Oeste y Central, de países como Senegal, Malí, Argelia, Túnez, Ghana, Nigeria, Camerún, Congo y República Democrática del Congo. En este sentido analizaremos el papel de Marruecos en el proceso de deslocalización de la Frontera Sur de Europa y cómo esto pone en marcha una forma de gubernamentabilidad y control en Marruecos sobre los menores migrantes procedentes de otros países. El trabajo de divide en cinco capítulos. El primer capítulo está formado por siete apartados. En el primer apartado comienzo por describir el punto de partida de esta investigación, mi llegada a la ciudad de Tánger en el año 1997 y el cambio acaecido durante los catorce años posteriores. En esta ciudad fronteriza he sido observadora ¿de primera fila¿ de los procesos de deslocalización de la producción del Norte al Sur del Mediterráneo; la aceleración del éxodo rural; la revolución tecnológica en el transporte y en la comunicación; la articulación de políticas de control migratorio y las formas de resistencia de las personas al endurecimiento de las fronteras. En esta tesis parto de analizar la reconfiguración de estos procesos globales en una dimensión fronteriza local como escenario de la migración autónoma de los niños y adolescentes marroquíes. En el segundo apartado formulo la hipótesis y los objetivos de este trabajo. La hipótesis de este trabajo se cuestiona, desde una perspectiva transnacional y entendiendo a los menores marroquíes que migran de forma autónoma como nuevos sujetos migratorios en el campo migratorio transnacional, si desde la capacidad de agencia de estos es posible llegar a una interpelación de las formas de gobierno que se despliegan sobre ellos y qué procesos de sofisticación del control generan estas interpelaciones. Esta investigación parte de una perspectiva transnacional, asumiendo ésta no como un modo de entrelazamiento de dos orillas geográficas, sino como una forma de análisis de los procesos de control, gobierno y resistencia de las personas que circulan en un campo migratorio transnacional. Este armazón teórico y metodológico en torno al transnacionalismo es desarrollado en el tercer apartado. En el apartado cuarto reflexiono en torno a la metodología usada en esta investigación pero enfocada desde el transnacionalismo. Tres serían las observaciones necesarias en torno a la cuestión metodológica. La primera es afirmar que para apropiarse de la fuerza analítica del uso del campo migratorio transnacional es necesario reformular desde una perspectiva transnacional las técnicas antropológicas usadas en el trabajo etnográfico. La segunda se refiere a la ¿inmersión vital del investigador¿, es decir, a como he estado ¿instalada¿ y he participado en el mismo campo migratorio transnacional que las personas que han participado en la investigación. En este sentido, estar instalada en el campo migratorio transnacional ha significado estar afectada y condicionada por las formas de gobierno que en éste se despliegan sobre los migrantes. El tercer aspecto se refiere a cómo el transnacionalismo es un armazón teórico para la comprensión de los procesos migratorios y también una metodología de investigación con capacidad de inspirar nuevas formas de intervención social y política. El quinto apartado se centra en la descripción del trabajo de campo de esta investigación, llevado a cabo en tres etapas, ya citadas anteriormente. El sexto apartado es una reflexión sobre los ¿riesgos¿ del trabajo de campo. Finalmente el séptimo apartado desarrolla las conclusiones de este trabajo, que están agrupadas en relación a los conceptos teóricos claves que lo recorren: transnacionalismo, movilidad infantil, autonomía y migración, gubernamentabilidad y agencia. El segundo capítulo se divide en tres apartados. Este capítulo desarrolla el marco teórico de esta investigación. La reflexión teórico-metodológica de este trabajo está construida en torno al transnacionalismo, la circulación de menores, la autonomía y la migración infanto-juvenil, las formas de gobierno de esta migración y la agencia que las interpela. El primer apartado arranca con un recorrido histórico sobre las distintas formas de circulación y movilidad infantil. Comienzo ilustrando cómo los niños y niñas han sido viajeros junto a sus familias, estudiantes en países diferentes a los suyos, desplazados como víctimas en distintos conflictos o trabajadores al otro lado del océano. Queremos así analizar el modo en que esta circulación ha sido gobernada y cómo los niños han sido construidos en cada momento histórico. Comienzo por un recorrido sobre la presencia de los niños y niñas en las migraciones a Estados Unidos a finales del siglo XIX, centrándome en las historias de los menores que llegaron a la Isla de Ellis, en la bahía de Nueva York. A continuación reflexiono sobre la situación en la que se encuentran los menores mexicanos y centroamericanos que migran ¿solos¿ a los Estados Unidos en la actualidad y la falta de garantías que viven en sus procesos de recepción y expulsión. Para profundizar en la cuestión de la infancia migrante contemporánea entre México, Estados Unidos y Centroamérica, me detengo en tres ciudades fronterizas mexicanas: Tijuana, Nogales y Ciudad Juárez, y en ellas analizo las formas en que esta movilidad infantil es gestionada, concluyendo que en esta región fronteriza la ecuación entre migración e infancia se salda con un férreo sistema de control sobre los menores y su movilidad. Continuando con este recorrido histórico, analizo cómo los menores de edad también han circulado en el marco de los imperios coloniales durante los siglos XIX y XX, en concreto cómo niños ingleses fueron movilizados como mano de obra en los distintos países de la antigua Commonwealth, Canadá, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Zimbabwe y Australia, desde principios del siglo XX hasta 1970. Y cómo, en la actualidad, los menores no acompañados que llegan al Reino Unido, principalmente afganos, están expuestos a una lógica restrictiva de derechos sobre la infancia migrante que condiciona el tipo de respuesta que reciben, siendo frecuentemente tratados más cómo migrantes irregulares que como menores titulares de derechos. También, a lo largo del siglo XX, los menores se han movido debido a los conflictos armados. Me refiero entonces a la historia reciente y traigo a escena a los niños republicanos del exilio en la Guerra Civil española y también en los jóvenes marroquíes, sobre todo rifeños, que fueron reclutados por Franco para luchar en esta misma guerra. Principalmente fueron marroquíes estos jóvenes alistados y también son en su mayoría marroquíes los ¿menores no acompañados¿ presentes en los sistemas de protección de la infancia de las distintas Comunidades Autónoma del Estado español en la actualidad. Niños y jóvenes marroquíes, pero también menores subsaharianos procedentes de África del Oeste y Central. Finalizo este recorrido histórico en otra isla, en la Isla de Gorée, en Dakar, reflexionando sobre la presencia de los niños en la trata de esclavos que desplazó a millones de personas de África a América y Europa a partir del siglo XVI. Tras este recorrido histórico planteo cuatro cuestiones clave: i) Que la migración de niños y niñas puede ser pensada como una forma de movilidad infantil y juvenil; ii) que la lectura histórica sobre la movilidad infantil nos desvela además cómo han sido pensados y construidos los niños y niñas ; iii) el interés de reflexionar sobre las variadas formas de gubernamentalidad en torno a la movilidad infantil; y, finalmente, iv) el interés en profundizar en el modo en que niños y adolescentes responden a estas formas de gobierno que los construyen (Monteros, 2007; Vacchiano, 2008), explorando su capacidad de interpelación como nuevos agentes migratorios. En el segundo apartado exploro la migración de menores de edad desde una visión más agencial. El punto de partida del análisis de los niños y jóvenes como un nuevo sujeto migratorio parte del análisis de los menores en la migración, es decir, la construcción académica actual que describe las formas en que niños y adolescentes están presentes en el panorama migratorio contemporáneo. A continuación, analizo las situaciones específicas donde los niños y niñas pueden jugar un papel sobresaliente en las estrategias migratorias de sus familias como puntos centrales en las estrategias migratorias familiares. Este es el puente que nos lleva hacia los procesos de migración autónoma protagonizada por niños y jóvenes. Llegados a este punto del capítulo llevo a cabo una reflexión sobre cómo a la luz del análisis sobre la feminización de la migración podemos hacer una lectura sobre la presencia de los menores de edad solos en la migración y nos preguntamos si es pertinente hablar de ¿minorización de la migración¿. Concluyo en relación a esta cuestión que, más que una infantilización de las migraciones, asistimos a un progresivo aumento de la migración o movilidad de las personas construidas como dependientes. Por lo tanto, centramos el debate en relación a la cuestión de la dependencia y la movilidad de los dependientes y afirmamos que la migración de niños y niñas de forma separada de sus padres y basada en una decisión autónoma y en una serie de circunstancias, recursos y objetivos que le son propios, tiene que ser pensada en el marco de tres procesos: i) las quiebras de los sistemas de dependencia; ii) los procesos selectivos de la frontera contemporánea y iii) la reformulación de la dependencia como un recurso, que nosotros analizamos en un campo migratorio transnacional. Esta reflexión sobre la dependencia nos lleva a afirmar que estos adolescentes y jóvenes que se mueven fruto de una decisión autónoma, conforman un nuevo agente migratorio y su migración inaugura una nueva forma de moverse. Esta nueva forma de moverse tiene que ver con una trasgresión social y simbólica, con la respuesta institucional de la protección de la infancia en Europa y con la territorialidad de los sistemas de protección, que entran en crisis frente a las estrategias de movilidad de los niños y jóvenes que migran. También la familia tiene que ser repensada a partir de la migración autónoma de los menores. Me interesa en este sentido desenfocar a la familia, para enfocar a los menores y así, analizar el ¿uso político del vínculo familiar¿ (Suárez y Jiménez, 2011) desde una perspectiva transnacional reubicando a la familia en un campo migratorio transnacional. En el tercer apartado llevo a cabo una reflexión de las formas de gobierno y la capacidad de interpelación por parte de los menores migrantes. En relación al análisis de las formas de gobierno relacionadas con la cuestión de la migración de menores en un campo social transnacional tengo en cuenta: las formas de gobierno de la migración en Europa, las formas de gobierno de la protección de la infancia y la gestión de la migración del sujeto jurídico construido como ¿menor no acompañado¿. Estas son analizadas desde cuatro aspectos: el jurídico, el procedimental, el institucional y el conceptual (Vacchiano y Jiménez, 2010). El análisis de estas formas de gobierno nos lleva a tres grandes conclusiones: i) que el régimen europeo de migración y el proceso de externalización de éste construye a Europa como una Fortaleza; ii) que los menores migrantes como ¿menores no acompañados¿ tienen en esta Fortaleza una doble condición: son menores sujetos derechos y migrantes objetos de control. Esta doble condición los construye como intrusos en la Europa Fortaleza y fundamenta la ocasión para el maltrato institucional y que, iii) la capacidad de interpelación de los sujetos desde la autonomía y la agencia, hace que en determinadas ocasiones sea posible que estas formas de gobierno sean interpeladas. Analizo las posibles formas de interpelación a esta condición de intrusos, centrándome en las reagrupaciones familiares de menores marroquíes llevadas a cabo entre el año 2000 y el 2008. En el tercer capítulo respondo a la cuestión de por qué Europa es pensada como una Fortaleza y los menores migrantes son tratados como intrusos. Para acercarnos a una respuesta analizo las políticas migratorias en la Unión Europea, de la protección de la infancia y de la regulación de la migración de los ¿menores no acompañados¿. Este capítulo consta de ocho apartados. En el primer apartado comienzo de nuevo con una reflexión sobre la movilidad infantil, al igual que en el segundo capítulo realizaba un recorrido histórico sobre la movilidad de niños y jóvenes. La reflexión con la que inauguro este capítulo me lleva a constatar cómo la movilidad ¿problemática¿ de algunos menores de edad es gestionada desde dos perspectivas contradictorias: por un lado, la sobreprotección que moviliza a tutores e instituciones públicas centradas en la infancia y por otro, la laxitud en las funciones de protección de las instituciones. En el segundo apartado parto de la reflexión sobre un Mediterráneo desigual y hago una breve reflexión sobre la cuestión de la movilidad en el Mediterráneo, porque es en este contexto dinámico donde resulta altamente interesante analizar la migración de los niños y adolescentes marroquíes, que está poniendo en jaque a las tecnologizadas fronteras. En el tercer y cuarto apartado me centro en el análisis de la Europa Fortaleza. Dibujo su gestación y cómo se extiende más allá de las fronteras geográficas a través del desplazamiento del control al Sur y al Este y a través de su externalización. Sostengo que el régimen de la Europa Fortaleza está formado por: i) una reglamentación jurídica restrictiva de derechos en relación a los migrantes; ii) unos procedimientos que ejecutan una lógica jurídica y política centrada en el control y no en la gestión de la migración; iii) unos instrumentos tecnológicos centrados en ejecutar este régimen europeo de migración; y iv) un tratamiento del extranjero como si se tratara de un ¿infrasujeto¿ (De Lucas, 1996, 2002a, 2009). En el quinto apartado me centro en el proceso de externalización de la Europa Fortaleza, específicamente al Sur, y describo este proceso que se lleva a cabo mediante: i) un conjunto de leyes de extranjería en los países del Norte de África que crean un ¿cinturón securitario¿ en el Magreb; ii) un conjunto de procedimientos (la Política Europea de Vecindad y la cooperación al desarrollo) que vehiculan intereses prioritarios de ¿filtraje selectivo¿ y control fronterizo (aunque estos procedimientos han entrado en crisis a partir de las revoluciones en el mundo árabe que comenzaron en Túnez en enero de 2011) ; iii) unas tecnologías centradas de una forma ambivalente en el control de las fronteras y las personas; y, finalmente, iv) la externalización de una visión cada vez más punitiva y criminalizadora de la migración. En el sexto apartado realizo una reflexión en torno al dinamismo entre el Norte de África (Magreb) y la región de África del Oeste, que pone de manifiesto el sistema de migraciones Sur-Sur / Este-Oeste. Este sistema de migraciones en África del Oeste está representado por la CEDEAO (Communauté Economique pour le Développement des États d¿Afrique del¿Ouest). La lógica del espacio CEDEAO tiene que interconectarse con la lógica del espacio Schengen y asimismo con la multiplicidad de formas de gobierno en ellas presentes. En el séptimo apartado me centro en la cuestión de la protección de la infancia en el campo migratorio transnacional. En el apartado octavo describo las formas de gobierno sobre la migración de menores y describo cómo se gesta su condición de intruso en la Fortaleza europea y en sus fronteras externalizadas. En el cuarto capítulo me detengo en las formas de gobierno sobre los menores marroquíes que migran de forma autónoma en la Frontera Sur de Europa. Junto a los menores marroquíes también he tenido en cuenta a los menores subsaharianos que están en este campo social transnacional. Presto atención a dos procesos que configuran y determinan la migración autónoma de menores marroquíes. Por un lado, las formas de gobierno de los menores marroquíes en la Frontera Sur de Europa marcados por el papel estratégico que Marruecos juega en el control de la Frontera Sur de Europa y, por otro lado, el proceso de deslocalización de la producción al sur del Mediterráneo y específicamente a Marruecos y a su región fronteriza de Tánger-Tetuán, centrándonos en Tánger como uno de los escenarios privilegiados donde he realizado una parte importante del trabajo de campo. Consta este capítulo de tres apartados. En el primer apartado desarrollo el papel de Marruecos en la Política Europea de Vecindad y en el proceso de deslocalización de la frontera europea y cómo la migración de menores marroquíes debe ser analizada en el marco de esta deslocalización. La condición intrusos de los menores que migran de forma autónoma tiene una traducción no sólo en Europa, sino también en la frontera deslocalizada que es Marruecos, esto se concreta en: i) el compromiso político por parte de Marruecos en la armonización de sus legislaciones con la Declaración de Derechos del Niño; ii) la ausencia de este compromiso en lo que se refiere al trato que reciben los menores marroquíes y los menores subsaharianos; ii) la ¿hipervisibilización¿ de la cuestión de la infancia migrante marroquí acentuada y vehiculada por la cooperación al desarrollo europea y iv) la invisibilización que sufren los menores subsaharianos. En el segundo apartado realizo un recorrido sobre la historia migratoria de Marruecos. En este apartado llevo a cabo una breve exposición de las que han sido las tres principales etapas de la migración (Berriane, 1996), condicionada esta, durante la época colonial, por la economía de la metrópoli y, tras la independencia, por la demanda de mano de obra en Europa, hasta la crisis de los años 70. En el marco de la historia migratoria, los niños y niñas también han migrado, principalmente con el comienzo de la política de reagrupación familiar en Francia, y más tarde en otros países como Italia y España. Es a principios de los años 90 cuando podemos advertir una migración autónoma por parte de los adolescentes y jóvenes, que son construidos en Europa bajo la categoría de ¿menores no acompañados¿. El en tercer apartado de este capítulo desarrollo la etnografía que analiza la migración autónoma de los menores en la ciudad fronteriza de Tánger. La migración autónoma de menores de edad se inscribe en un contexto complejo donde entran en juego factores económicos, socio-demográficos, políticos, sociales, jurídicos e ideológicos. Tres son los ejes vertebradores de estos contextos en la ciudad de Tánger: la quiebra de los sistemas de dependencia, los procesos selectivos de fronteras y la dependencia como recurso en un campo migratorio transnacional. En este apartado sostengo que la aproximación a esta forma de movilidad infantil desde la construcción teórica de la migración autónoma nos aporta una visión desde la agencia de los menores de edad. Esta migración autónoma la analizo en función de las circunstancias, los recursos propios e intransferibles y los objetivos distinguibles de los de la familia que fundamenta la toma de decisión de la migración en los adolescentes y jóvenes. Sostengo, además, que estos menores inauguran una nueva manera de moverse, condicionada por un contexto de control ya descrito, y que es necesario preguntarnos sobre el lugar que ocupa la familia a la luz de la migración autónoma de los hijos e hijas. El quinto capítulo consta de tres apartados. En el primer apartado me centro en cómo es construido el menor como intruso en el ya citado proceso de deslocalización de las fronteras y en el modo en que la gubernamentabilidad de transnacionaliza (Fergunson y Gupta, 2002) en los procesos de control fronterizo. Analizo, por un lado, cómo los menores migrantes marroquíes son construidos como una ¿amenaza¿ analizando la biopolítica del control que se ha desplegado en el puerto de Tánger y, por otro, cómo es la situación que viven los menores subsaharianos en Marruecos, también presentes en este campo migratorio transnacional. A continuación exploro la condición de intrusos de los niños y jóvenes que migran de forma autónoma en la Frontera Sur de Europa, centrándonos en el Estado español. El escenario por antonomasia donde se vislumbra la condición de intrusos es el modo en que se han llevando a cabo las repatriaciones y/o las reagrupaciones familiares a Marruecos. En el segundo apartado me detengo en analizar la capacidad de interpelación de estos nuevos sujetos migratorios a estas formas de control. El análisis de esta capacidad de agencia está plasmado en todo el trabajo de forma transversal, quedando de manifiesto en el hecho de pensar a los menores como nuevos agentes migratorios que se mueven fruto de una decisión autónoma en relación a sus circunstancias, recursos y objetivos; diferenciándose de la familia o en sintonía con ella, pero desde una decisión autónoma. En el tercer apartado concluyo con una reflexión sobre la necesidad de inaugurar nuevas formas de militancia social que intervengan en estos nuevos contextos, siendo, un ejemplo, la mediación social transnacional.