Efectos de la hidratación intraparto en los resultados obstétricos y neonatales en gestantes nulíparas de bajo riesgo

  1. Hernández López, Ana Belén
Dirigida por:
  1. Montserrat Solís Muñoz Director/a
  2. Tirso Pérez Medina Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 13 de octubre de 2022

Tribunal:
  1. Miguel Angel Marin Gabriel Presidente/a
  2. Mª. Lourdes Casillas Santana Secretario/a
  3. Paloma Martínez Serrano Vocal
  4. Fátima García Benasach Vocal
  5. María Teresa Ramírez López Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Introducción: Una hidratación materna adecuada durante el parto es fundamental para garantizar unas contracciones eficientes (Eslamian, Marsoosi y Pakneeyat, 2006). Sin embargo, se dispone de pocos datos que ayuden a tomar decisiones sobre la hidratación óptima de las mujeres durante el parto, lo que ha dado lugar a amplias variaciones en la práctica clínica (Coco et al., 2010; O'Sullivan y Scrutton ,2003). Asimismo, la evidencia sobre la influencia de la cantidad y el tipo de fluidos administrados en gestantes de bajo riesgo durante el trabajo de parto respecto a la seguridad clínica materna y neonatal no es suficiente para respaldar la toma de decisión clínica. Objetivos: (a) Conocer las pautas de hidratación en gestantes nulíparas con trabajo de parto de bajo riesgo en relación a: tipos de soluciones (agua, bebidas isotónicas) y volúmenes administrados por vía oral; tipos de soluciones (fisiológico, ringer lactato, dextrosa al 5%, glucosalino), volúmenes y forma de administración (goteo o bomba de perfusión) por vía intravenosa. (b) Determinar la influencia de las pautas de hidratación intraparto en los resultados y las complicaciones maternas y neonatales, valorando las diferencias por tipo de parto y volumen administrado. (c) Identificar los biomarcadores que definen el estado de hidratación de la gestante nulípara durante trabajo de parto de bajo riesgo y su relación con el volumen de líquido administrado durante el trabajo de parto. Métodos: Se realizó un estudio observacional de cohortes prospectivo en el Hospital Universitario Puerta de Hierro Majadahonda (Madrid, España). La población de estudio incluyó mujeres nulíparas con gestación única, con edad igual o mayor a 18 años y a sus neonatos, atendidas por matronas por parto de bajo riesgo, activo o inducido. El tamaño de la muestra calculado fue de 142 mujeres. Muestreo no probabilístico. Las mujeres fueron informadas del estudio y firmaron el consentimiento informado. Se elaboró un Cuaderno de Recogida de Datos, que incluía variables maternas (sociodemográficas, clínicas al ingreso, intraparto y en el puerperio inmediato, resultados obstétricos) y neonatales (características, datos clínicos al nacimiento, a las 24 y 48 horas). Se realizó análisis descriptivo y univariante con los test estadísticos correspondientes. Se realizó análisis de correlación de Pearson para evaluar la asociación entre las variables implicadas. Se realizaron varios modelos de regresión lineal simple para evaluar el tamaño del efecto del volumen ingerido durante todo el trabajo de parto con diferentes biomarcadores. Para estratificar a las mujeres en función de la hidratación recibida, se estableció como punto de corte la mediana del volumen total administrado por hora (300 mL/h), lo que permitió comparar los resultados obstétricos, clínicos y neonatales de las mujeres que habían recibido >300 mL/h o ≤300 mL/h. La variable de resultado principal fue la duración total del trabajo de parto. Se tuvieron en cuenta resultados obstétricos maternos y neonatales, así como biomarcadores urinarios. Todos los análisis se realizaron con niveles de confianza del 95% (p≤ 0,05). Se utilizó el programa Stata/IC v.16.0. Resultados: Se inlcuyeron en el estudio 148 mujeres. Edad media (DE) 32 años (4,4) años, edad gestacional media (DE) 39 (1,41) semanas más 3 (1,9) días. Al ingreso, la dilatación media fue de 2 (1-3) cm, siendo significativamente más favorables en aquellas gestantes que comenzaron el trabajo de parto de forma espontánea (p<0,001). El trabajo de parto fue inducido en el 65,5%, siendo la causa principal la rotura prematura de membranas (54,6%). Los electrolíticos séricos y función renal se encontraban dentro de los rangos de normalidad. Durante el trabajo de parto el 64, 9% de las gestantes presentaban sensación de boca seca, sed de 4 (EVA), no disminuyendo en las gestantes que recibieron mayor volumen de líquidos. El uso de dispositivos locorregionales para el control del dolor intraparto fue del 95,5%, teniendo un mejor control del dolor el grupo de trabajo inducido (p<0,001). La tasa de fiebre intraparto fue del 6,9%, siendo del 3,7% en el puerperio. La fiebre se correlacionó de forma estadísticamente significativa con el tiempo de analgesia epidural (p=0,001) y con el tiempo total de trabajo de parto (p=0,046). Las gestantes con trabajo de parto espontáneo tuvieron una disminución significativa de los tiempos valorados: con rotura de membranas (p<0,001), con oxitocina (p>0,001), rotura de membranas y temperatura máx (p<0,001), fase latente (p<0,001) y tiempo total de trabajo de parto (p<0,001). Un volumen de líquidos > 300mL/h redujo de forma significativa los tiempos de trabajo de parto: primera fase de trabajo de parto (p=0,009), tiempo total de trabajo de parto (p<0,001), tiempo con oxitocina (p= 0,044) y analgesia locorregional (p=0,019). El 2,7% de las gestantes tuvieron un parto prolongado. Dentro de los biomarcadores urinarios, el indice de hidratacion óptima (UOSM<500 mOsm/kg), fue significativamente mayor en el grupo inducido (p=0,036). El color de la orina se mantuvo dentro de los mismos parámetros durante todo el trabajo de parto (UCOL=4). El volumen de orina aumentó en proporción al volumen de ingesta de líquidos, mientras que la osmolalidad y las concentraciones de urea, creatinina, sodio y potasio disminuyeron con una mayor ingesta de líquidos. El color de la orina estaba inversamente relacionado con la ingesta de líquidos. El 12,8% (n=19) de las gestantes desarrollaron hiponatremia (sodio plasmático ≤ 135 mEq/L) durante el parto. El sodio plasmático materno más bajo registrado en el puerperio fue de 128 mEq/L. Se observó una incidencia ligeramente mayor de hiponatremia materna en aquellas gestantes que tuvieron volumen de líquidos intraparto ≥300 ml/h, no siendo estadísticamente significativa la diferencia (p=0,454). De las 19 mujeres que al finalizar el trabajo de parto tuvieron hiponatremia, el 63,1% presentaban hiponatremia en el ingreso y el 50% la mantuvieron al finalizar el trabajo de parto. La incidencia de hiponatremia fue mayor (20%) en el grupo con mayor volumen de líquidos sin poder establecer una diferencia estadísticamente significativa (p=0,454). La incidencia de cesárea y parto instrumentado fue del 16,9% y 31,1%, respectivamente. En las gestantes no hubo ningún caso de encefalopatía hiponatremica, edema agudo de pulmón, broncoaspiración. El 32% de los neonatos tuvieron hiponatremia (sodio en sangre de cordón < 135 mEq/L), encontrando correlación significativa entre la concentración de sodio arterial umbilical y los valores de sodio maternos posparto (p=0,002). El sodio plasmático más bajo correspondiente en la arteria umbilical fue de 126 mEq/L. La pérdida de peso superior al 10 % al nacer fue del 4,7%, siendo más frecuente en el grupo de madres qur recibieron volúmenes > 300 mL/h (5,4%), no encontrando diferencias estadísticamente significativas (p=0,416). La incidencia de hiperbilirrubinemia fue mayor en el grupo de madres que recibió menor volumen, siendo la incidencia de problemas respiratorios mayor en el grupo de neonatos cuyas madres recibieron mayores volúmenes de líquido intraparto. Las tasas de inicio de lactancia materna en los primeros noventa minutos de vida fueron de 89,6%, manteniéndose al alta en un 87,2%. Estas tasas aumentaron en aquellas mujeres que habían recibido volúmenes de líquidos intraparto superiors a 300 mL/h, siendo de un 93% de lactancia materna en los primeros noventa minutos de vida y de un 94,6% al alta hospitalaria. Conclusiones: Un mayor volumen de líquido (superior a 300 mL/h) administrado a mujeres nulíparas durante el trabajo de parto se asoció con mejores resultados obstétricos (duración reducida de la primera etapa del trabajo de parto, duración total del trabajo de parto, duración de la oxitocina, duración de la anestesia epidural e incidencia de intraparto fiebre y parto por cesárea) y mejores resultados neonatales (reducción de la pérdida de peso a las 24 y 48 horas, menor incidencia de pérdida de peso> 7% a las 48 horas, mayor incidencia de lactancia materna, menor incidencia de complicaciones). Los hallazgos de este estudio brindan nueva evidencia a favor de una hidratación adecuada para las mujeres durante el trabajo de parto, lo que podría mejorar la salud y seguridad de las madres y sus recién nacidos y reducir la morbilidad materna y fetal. Palabras clave: hidratación del parto; resultados obstétricos, resultados neonatales; biomarcadores; matrona. Bibliografía: Eslamian, L., Marsoosi, V. and Pakneeyat, Y. (2006). Increased intravenous fluid intake and the course of labor in nulliparous women. Int J Gynaecol Obstet ;93(2):102-5. doi: 10.1016/j.ijgo.2006.01.023. Coco, A., Derksen-Schrock, A., Cocom K., Raff, T., Horst, M. and Hussar E. (2010): A randomized trial of increased intravenous hydration in labor when oral fluid is unrestricted. Fam Med;42(1):52-6. O’Sulllivan, G. and Scrutton, M. (2003). NPO during labor: ¿Is there any scientific validation? Anethesiol Clin North America;