Temas de orientalismo y egipcianismo en "La novela de Egipto" de José de Castro y Serrano
- Abdelkader Metwaly, Mohamed Mahmoud
- Óscar Barrero Pérez Director
Universidade de defensa: Universidad Autónoma de Madrid
Fecha de defensa: 10 de febreiro de 2016
- Bernabé López García Presidente/a
- Mauro Jiménez Secretario/a
- Saad Mohamed Saad Vogal
- Juan Martos Quesada Vogal
- José Antonio González Alcantud Vogal
Tipo: Tese
Resumo
Título de la Tesis: Temas de orientalismo y egipcianismo en “La novela del Egipto”, de José de Castro y Serrano. La novela del Egipto se escribió con motivo de la inauguración del canal de Suez el 17 de noviembre de 1869. Esta obra se considera la herencia narrativa de la historia de Egipto del siglo XIX, y se distingue por su descripción detallada del país del Nilo. De la misma manera, la obra refleja que la relación cultural de España con Egipto se remonta a tiempos muy lejanos y quedó grabada en la memoria de viajeros y estudiosos españoles, así como también de los gobernantes egipcios. El gran interés que despertó el egipcianismo en escritores, artistas y arqueólogos, españoles y europeos residió en que descubrieron lo maravilloso, lo misterioso y lo mágico de un país que fascinó al mundo entero, tanto por su escritura jeroglífica como por la majestuosidad de sus pirámides. Los viajeros del siglo XIX, a través de sus cuentos, relatos y de sus cuadernos de viajes, ayudaron a forjar una imagen orientalizante de Egipto y de los países del Oriente árabe. Los escritores de la época plasmaron con éxito un imaginario egipcianista que repercutió en las conciencias occidentales y que, de forma directa, se trasladó a la literatura, estableciendo con ello un puente entre la imagen y la realidad que perduró durante décadas. Las revistas ilustradas en la segunda mitad de la centuria decimonónica, ayudaron igualmente a popularizar dicho imaginario, mediante la publicación de cuentos orientales y artículos sobre Egipto. En esta tesis he comprobado que el orientalismo y el egipcianismo envolvieron tanto a escritores europeos como a un notable número de historiadores, estudiosos, investigadores y escritores españoles de tendencia arabista. Bajo la superficie de las manifestaciones arábigo-andaluzas, intentaron con sus escritos y con su metodología científico-cultural, reconstruir lo que hubo en España durante los siglos de convivencia entre las tres culturas o, más bien, entre las tres religiones. Estos excelentes literatos del siglo XIX, contribuyeron con sus obras, a la devolución de una parte del florecimiento histórico que tuvo en España la cultura arábigo-islámica. José de Castro y Serrano, en La novela del Egipto, trató varios temas de orientalismo y egipcianismo: temas de la civilización faraónica, temas de la cultura copta y temas de la civilización islámica. Este trabajo destaca la imagen olvidada del fellah o campesino egipcio que trabajó para el bien de la sociedad. El fellah egipcio yace desde la antigüedad en la base de la pirámide social, razón por la cual en esta tesis he intentado resaltar su relevante papel en la construcción del canal de Suez; ellos soportaron con sus trabajos grandes penurias muriendo muchos de sed y de epidemias, que se propagaron entre la comunidad de los trabajadores egipcios. José de Castro y Serrano en su acercamiento a los temas religiosos y éticos, nos lleva a la reflexión de lo religioso como compensación de nuestra pequeñez humana ante la brevedad de la vida terrenal. La religiosidad egipcia del contexto faraónico había preparado al país para admirar las atribuciones sobrenaturales de los monarcas sucesivamente invasores. Después llega el islam y con él la maduración definitiva al influir esta religión, en el ámbito de la conciencia social egipcia. José de Castro y Serrano se acerca en su novela a la religión cristiana en el Egipto copto, que representa la autenticidad y la pureza del cristianismo oriental como dogma. Los coptos son la encarnación del alma y de las arraigadas costumbres del antiguo pueblo egipcio. La liturgia copta es una de las más estrictas del mundo por su antigüedad y por su carácter didáctico. Doctrinas como la copta ya desaparecieron en muchos lugares del mundo, pero en Egipto la situación es distinta, porque en este país, al parecer, todo se eterniza bajo la sombra de las pirámides. En La novela del Egipto se alaba la generosidad, el honor y la nobleza de los árabes, entendidos estos, no solo como creyentes de la religión islámica, sino como un grupo social con costumbres religiosas cotidianas. El escritor pondera en su obra, la extraordinaria hidalguía de los árabes y hace una especial referencia a la vida de Hatim At-Taey como uno de los personajes más generosos de la historia árabe. La obra también trata de temas culturales como la gran Biblioteca de Alejandría. El autor nos describe en primera persona su visita a la ciudad de El Cairo del siglo XIX y va enumerando las cosas que contempla en esta ciudad milenaria. José de Castro y Serrano mezcla en su obra vidas pasadas traídas al presente y narra haber vivido ocho largos meses en ocho cortos días. En resumidas palabras el autor da rienda suelta a una fantasía occidental, que se alimenta de ensoñaciones orientales. En La novela del Egipto, el escritor habla sobre la mujer egipcia y su situación en la vida social del Oriente árabe. La imagen de la mujer egipcia en virtud del orientalismo es una visión del exotismo y del imaginario orientalista, que se reflejará con nitidez por parte del autor en algunas descripciones. Otro de los temas importantes abordados por el escritor en La novela del Egipto es el tema del harén; el harén es una de las novedades que los cristianos encontraron cuando llegó el islam. José de Castro y Serrano trata el tema de la poligamia asegurando que es el elemento cultural de separación entre Oriente y Occidente. El autor critica las costumbres islámicas que se desarrollan en torno al harén y a la legitimidad de la poligamia. Es aquí donde aparece de nuevo el argumento esencial por el cual los occidentales supuestamente, rechazan el islam. El tratamiento que en el mundo musulmán se le da a la mujer, considerándola como un ser humano de segunda clase, es lo que verdaderamente focaliza su atención. El autor sabe que en este aspecto sus lectores españoles, van a compartir su opinión. Finalmente, sólo cabe añadir que José de Castro y Serrano, en La novela del Egipto, ha sido un buen egipcianista en el más amplio sentido de la palabra, porque escribió todo en el ámbito de su temática oriental. Asimismo, José de Castro y Serrano fue un fiel egipcianista que se acercó a la realidad social del Egipto del siglo XIX.