Impacto de los nuevos criterios de cribado para la retinopatía de la prematuridad. Un año de experiencia

  1. C.R. Pallás Alonso
  2. J. de la Cruz Bértolo
  3. P. Tejada Palacios
  4. C. Fernández
  5. M.C. Muñoz Labian
  6. M.P. Carreño Guerra
Revista:
Anales de Pediatría: Publicación Oficial de la Asociación Española de Pediatría ( AEP )

Año de publicación: 2001

Volumen: 55

Número: 1

Páginas: 53-57

Tipo: Artículo

DOI: 10.1016/S1695-4033(01)77625-4 DIALNET GOOGLE SCHOLAR lock_openAcceso abierto editor

Resumen

Objetivo Describir el rendimiento de un programa de cribado de la retinopatía de la prematuridad (ROP) en términos clínicos y económicos después de la introducción de nuevos criterios de elegibilidad. Método A partir de la información recogida a lo largo de 1991–1998 se determinaron unos nuevos criterios con objeto de reducir de forma segura el número de niños explorados sin dejar de diagnosticar ningún caso de ROP 3. Durante 1999, los niños fueron explorados de acuerdo a estos nuevos criterios. Se determina la reducción en el número de pacientes que han requerido se hubieran explorado siguiendo los nuevos criterios comparados con los criterios anteriores. Criterios 1991–1998: a) peso de nacimiento < 1.500 g o edad gestacional <33 semanas; b) edad gestacional de 34–36 semanas con administración de suplementos de oxígeno durante al menos 24 h. Criterios 1999: a) peso de nacimiento <1.250 g o edad gestacional <30 semanas; b) niños con peso de nacimiento > 1.250 g y edad gestacional >30 semanas especialmente graves según el criterio del neonatólogo. Resultados Con la aplicación de los nuevos criterios de cribado se han explorado 72 niños en 1999. Si los criterios no se hubieran modificado se hubieran explorado 244 pacientes. El número de exploraciones oftalmológicas ahorradas ha sido de 369 y el coste monetario directo estimado puede haberse reducido en más de 30.000 euros. Conclusiones Con la aplicación de los nuevos criterios el número de pacientes que requieren cribado se ha reducido en el 70%. Una estrategia diseñada específicamente para cada centro puede garantizar la inclusión en el programa de cribado para la ROP de todos los niños con riesgo de desarrollar la enfermedad y minimizar el número de niños explorados y el coste del cribado de forma segura.