Entrede repente, sin fin, lo innombrable

  1. Giannopoulou, Efpraxia
Dirigida por:
  1. Javier Seguí de la Riva Codirector/a
  2. Atxu Amann Alcocer Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad Politécnica de Madrid

Fecha de defensa: 08 de febrero de 2016

Tribunal:
  1. Ángel Gabilondo Pujol Presidente/a
  2. Emilio López-Galiacho Carrilero Secretario/a
  3. Pedro Burgaleta Mezo Vocal
  4. Polyxeni Mantzou Vocal
  5. Eugenia Popeanga Chelaru Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Etiquetamos para reducir nuestra incertidumbre; clasificamos en base a términos opuestos para poder entender. El universo y el espacio construido en particular, se explican desde una arquitectónica dual: dentro – fuera, arriba – abajo, derecha – izquierda, día – noche, hombre – mujer. Lo que nos diferencia como grupo, raza o género, distinguiendo los modos de vivir, las ideologías y las teorías, es la relación que establecemos entre los términos opuestos: entre lo individual y lo colectivo, lo privado y lo público, la imaginación y la realidad, la identidad y la otredad, el orden y el caos, el deseo y la saciedad. El afán clasificatorio dicotómico de la realidad que la modernidad lleva a su extremo, hiere la vida: la mutua exclusión de los opuestos elimina la distancia, el espacio-tiempo entre ambos, que es donde la vida se sitúa. La concepción dual que rige nuestro conocimiento contamina también la relación entre los arquitectos y la sociedad, siendo la causa del ambiente tóxico que envuelve al habitante que ya no se identifica con los lugares que habita. Puede que sea oportuno pasar del pensamiento binario a una lógica de lo intersticial que abandone la dualidad para instalarse en el Entre; los arquitectos serían mediadores entre el poder y la vida, sintiendo el Entre como el transcurso de la vida y la potencia de interacción: los lugares ambiguos e intermedios, es donde sucede el encuentro entre los términos, entre arquitectos y habitantes, entre la imaginación y la realidad, entre tú y yo. ABSTRACT We label to reduce our uncertainty; we classify based on opposites to understand. The universe and all constructed space in particular, are explained from a dual architecture: inside - out, up - down, right - left, day - night, male - female, black - white. What differentiate us as a group, race, gender, distinguishing the lifestyles, ideologies and theories, is how we draw the relation between the opposites: between the individual and the collective, private and public, imagination and reality , identity and otherness, order and disorder, desire and satiety. The dichotomous classification of reality that modernity carried to its extreme, hurts life: the mutual exclusion of opposites eliminates the distance, the space-time between the two, which is where life is located. The dual conception that governs our knowledge has also contaminated the relationship between architect and society, being the cause of the toxic environment that surrounds the inhabitant who no longer identify himself with the places he inhabit. It may be appropriate pass from binary thinking to a logic of the interstitial which abandon duality to settle in Between; architect then will be the mediator between authorities and life, sensing the Between as a flowing of life a potency of interaction rather than a separation between the extremes; ambiguous, in –between, places are where the encounter between opposites happens, between the architect and the inhabitant, between imagination and reality, between you and me.