La condesa de Berlepsch entre Düsseldorf, Madrid y Vienaagencia femenina y poder informal (1654-1723)

  1. KOZÁK, VALENTINA MARGUERITE
Dirigida por:
  1. Carmen Sanz Ayán Directora

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 04 de noviembre de 2022

Tribunal:
  1. Fernando Bouza Presidente
  2. Alejandra Franganillo Álvarez Secretaria
  3. Feliciano Barrios Pintado Vocal
  4. Marcella Aglietti Vocal
  5. Francisco Andújar Castillo Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La presente tesis doctoral reconstruye la trayectoria transnacional de la baronesa, y desde 1695 condesa, de Berlepsch en las cortes de Düsseldorf, Madrid y Viena, con el fin de estudiar la totalidad de sus actividades en dichos ámbitos palaciegos. El marco biográfico utilizado para estudiar el cursus honorum transnacional de la condesa sirvió para entender los procesos de su integración en las redes clientelares del elector palatino Juan Guillermo, del emperador Leopoldo y de la reina María Ana y nos ha permitido conocer su papel en la corte hispana durante la última década del reinado de Carlos II. A través del enfoque europeo y trasnacional dado a este estudio, hemos podido interpretar sus actividades en los espacios áulicos y analizar, desde una nueva perspectiva, los acontecimientos políticos y diplomáticos en torno a la cuestión sucesoria española. Esta investigación cuestiona así mismo la visión tópica y tradicional difundida hasta ahora sobre la condesa, para lo que ha sido preciso analizar sus actividades políticas paraoficiales en el contexto de la camarilla alemana. No se pueden entender las actividades y el peso sociopolítico de la condesa en la corte de Madrid sin haber estudiado su trayectoria anterior y sus orígenes protestantes y bajo nobiliarios. Esta investigación ha revelado que la condesa de Berlepsch obtuvo, después de la muerte de su esposo en 1676, no sin dificultades, la tutela sobre sus dos hijos menores. El alejamiento de su entorno socioeconómico de origen en 1682 le obligó a ponerse bajo el amparo del príncipe-abad de Fulda, explotando además su estatus de viuda de un capitán fallecido al servicio del Sacro Imperio para obtener el favor imperial. Estas circunstancias promovieron su conversión al catolicismo y le permitieron integrarse a un entorno palaciego regional desde el que inició su cursus honorum transnacional. Tras servir cinco años en la Casa de la esposa de Juan Guillermo del Palatinado-Neoburgo, en Düsseldorf, la condesa fue elegida para formar parte del séquito de la futura reina de España, acompañándola durante su jornada. En 1689 se trasladó junto a María Ana a los territorios de la Monarquía Hispánica, obteniendo a su llegada, en 1690, el cargo de dueña de honor, incorporándose así a la estructura de la Casa de la reina formando parte de su entorno más íntimo. Después del arribo de María Ana a la corte española, se constituyó la camarilla alemana; un grupo de interés que formó un ámbito favorable para apoyar los intereses de la Casa ducal en Madrid. Hemos distinguido entre las cuatro facciones coexistentes y de composición flexible para determinar las temporalidades, conceptos, cronologías e integrantes más destacados. Cabe resaltar que la camarilla alemana conformó el ámbito de acción de la condesa y que las redes de contacto tejidas por sus miembros le permitieron consolidar su posición en Madrid. Por otra parte, esclarecimos la diferencia entre las actividades de la condesa de Berlepsch para la Casa ducal y su apoyo a la causa imperial representada por la facción pro-imperial. Se ha podido concluir que la condesa sirvió desde 1696 de intermediaria entre los embajadores imperiales y la reina, transformándose en un elemento clave de la legación imperial en Madrid. El análisis de sus actividades reveló también la problemática de la doble lealtad de la condesa y se han estudiado las implicaciones de su pertenencia al sistema de favores y movilidad del elector y por extensión del emperador. Tras haber estudiado el conjunto de sus actividades, se pudo concluir que existieron tres fases de intervención de la condesa: un periodo inicial que se extiende de 1690 a 1695, una fase de auge de actividades entre 1695 y 1698 y una fase final entre 1698 y 1700. Por último, cabe resaltar que su salida fue analizada como un alejamiento estratégico, que, en este caso, formó parte de una estrategia para intentar fortalecer la posición e imagen de la reina María Ana.