Análisis de la farmacoterapia en cáncer de próstata metastásico resistente a la castración e identificación de factores predictivos de respuesta

  1. GARCIA-TREVIJANO CABETAS, MACARENA
Dirigida por:
  1. José Antonio Romero Garrido Director
  2. E. Espinosa Arranz Director/a
  3. Juana Benedí González Directora

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 13 de julio de 2022

Tribunal:
  1. Irene Iglesias Peinado Presidenta
  2. Alicia Herrero Ambrosio Secretaria
  3. Miguel Angel Calleja Hernández Vocal
  4. Alvaro Pinto Marín Vocal
  5. Francisco Zaragoza Arnáez Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

A pesar de que el cáncer de próstata inicialmente responde a la terapia de deprivación androgénica, con el tiempo pasa a la resistencia a la castración. Es interesante conocer la efectividad de fármacos antiandrógenos de nueva generación, como abiraterona o enzalutamida, en un entorno ajeno al de los ensayos clínicos y analizar la influencia de diferentes características basales en la supervivencia global (SG) de los pacientes con cáncer de próstata metastásico resistente a la castración (CPRCm). El PSA es el único biomarcador útil en la monitorización de la respuesta al tratamiento. A pesar de que los criterios del PCWG3 no recomiendan evaluar la respuesta en las primeras 12 semanas, diferentes estudios han demostrado una asociación entre la reducción temprana del PSA y la SG. El objetivo es analizar la utilización de abiraterona y enzalutamida en pacientes con CPRCm que no hubieran recibido quimioterapia. Los objetivos secundarios establecidos fueron: 1. Analizar la influencia del tratamiento con abiraterona o enzalutamida en la SG. 2. Caracterizar parámetros basales que puedan impactar en la SG. 3. Evaluar la reducción del PSA y su influencia en la SG. 4. Identificar factores pronósticos y predictivos de respuesta. 5. Cuantificar la adherencia y su relación con la SG. Se incluyeron 90 pacientes; 57 con abiraterona, 33 con enzalutamida. La mediana de seguimiento fue 2 años. La mediana de SG fue 27 meses; no hubo diferencias significativas entre ambos tratamientos. El ECOG, dolor, afectación visceral y ALP proporcionaron información pronóstica independiente. Una respuesta bioquímica (reducción del PSA del 50%) se asoció con una mejor SG. Aunque se observó una tendencia favorable en la SG de los pacientes respondedores tempranos (reducción del PSA del 30% en la semana 4), no se alcanzó significación estadística. Casi todos los pacientes con reducción temprana del PSA mantuvieron ese descenso en la semana 12, y en ese momento, dicha reducción se correlacionó significativamente con una mejor SG. Se observó una tendencia desfavorable en la SG en los pacientes con progresión bioquímica temprana (aumento del PSA superior al 25% en la semana 4), aunque no fue significativa. La progresión bioquímica temprana se correlacionó con los mismos cambios en el tercer mes, y en ese momento, impactó de forma estadísticamente significativa en la SG. La progresión clínica se asoció con un detrimento de la SG. La mayoría de los pacientes alcanzó una adherencia superior al 90%, con una mediana de SG del doble de tiempo que aquellos con una adherencia inferior. A pesar de la clara tendencia observada, no se alcanzó significación estadística. Los efectos adversos fueron consistentes con el perfil de seguridad establecido para ambos fármacos. Conclusiones: 1. La SG de nuestros pacientes es inferior a la observada en los ensayos, lo que puede estar justificado porque partían de características basales asociadas con peor pronóstico. 2. El ECOG, afectación visceral, nivel de ALP y dolor han demostrado ser predictores de la SG. 3. Una reducción del PSA del 50% se ha asociado con una mayor SG. 4. La reducción del PSA del 30% en la semana 4 no ha demostrado un impacto significativo en la SG; sin embargo, los respondedores tempranos muestran una clara tendencia a alcanzar una mayor SG y la práctica totalidad de ellos mantienen esta reducción en la semana 12. 5. El incremento del PSA en un 25% en la semana 4 tampoco ha tenido un impacto significativo en la SG, aunque se ha asociado a una mayor probabilidad de progresión en la semana 12, permitiendo identificar a los pacientes con mayor probabilidad de fracaso a estos fármacos. 6. La variación del nivel de PSA en la semana 12 confirmó un impacto en la SG. 7. La progresión clínica impactó de forma negativa en la SG. 8. La mayoría de los pacientes mostraron un nivel de adherencia superior 90%, alcanzando una mediana de SG de prácticamente el doble de tiempo, aunque no se alcanzó significación estadística.