Actitudes, hábitos alimentarios y estado nutricional de atletas participantes en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92

Resumen

Se ha llevado a cabo un estudio nutricional en 126 atletas (92 hombres y 34 mujeres) participantes en la XXV olimpiada celebrada en Barcelona en 1992. Se obtuvo información mediante cuestionario sobre antropometría, actividad física, ingesta de alimentos (técnica de recuerdo de 24 horas) y datos relacionados con actitudes y hábitos alimentarios de los atletas: conocimientos de nutrición, consumo de suplementos, preferencias y aversiones, etc. Se han estimado las ingestas recomendadas (IR) de energía y nutrientes para cada uno de los participantes en función del sexo, edad, actividad física, peso corporal y consumo de energía, con el fin de valorar la ingesta real mediante comparación con las mismas. Se ha juzgado la adecuación de: energía, hidratos de carbono, fibra dietética, lípidos totales y sus fracciones: ácidos grasos monoinsaturados (agm), ácidos grasos poliinsaturados (agp), ácidos grasos saturados (ags), colesterol, proteína, vitaminas: tiamina, riboflavina, equivalentes de niacina, B6, ácido fólico, B12, ácido ascórbico, equivalentes de retinol, D y E y minerales: calcio, hierro, magnesio, zinc, sodio y potasio. Además, como medida cualitativa de la dieta se han calculado los siguientes índices: perfil calórico y lipídico y relación agp+agm/ags. Se observa que el gasto energético de los hombres (3281+-572kcal) es significativamente superior al de mujeres (2559+-437kcal) (p<0.001), debido a su mayor tasa metabólica basal, lo que les lleva a un consumo de alimentos superior excepto para los grupos de pescados y azúcares. El consumo de menores cantidades de alimentos que las habituales origina que la ingesta energética del 46% de la muestra no haga frente al gasto. El perfil calórico es adecuado: 17% proteína, 52% hidratos de carbono y 30% de lípidos. Dicho perfil, consecuencia del modelo dietético, está en consonancia con la búsqueda de los nutrientes considerados más importantes para el ejercicio físico: hidratos de carbono (54%) y proteínas (23%) y el rechazo de los perjudiciales: grasa (40%) y dulces (21%) y con sus preferencias: pasta (24%), carne (21%), dulces (13%) y frutas y/o zumos (12%) y aversiones, verduras (21%). La vitamina E es la que presenta valores más insuficientes 32+-21 y 29+-16% para hombres y mujeres respectivamente. Entre mujeres se observan además ingestas deficitarias de ácido fólico (80+-40%), vitamina D (71+-151%), hierro (59+-21%), magnesio (81+-28%) y zinc (64+-26%). Estas deficiencias podrían ser subsanadas por el hecho de que el 72% de los atletas consume suplementos: vitaminas (55%) y minerales (39%)