La noción de alteridad en Cornelius Castoriadis

Resumen

Esta tesis aborda en el pensamiento y la obra institucional de Castoriadis, su noción de alteridad. Parto de una revisión somera del campo de las ciencias sociales, en particular la antropología y paso a describir el contexto disciplinar en el que se inscribe la noción. Gracias a una hipótesis de trabajo desarrollo el argumento pasando por una primera conceptualización como ausencia de sentido y emergencia de lo nuevo prosiguiendo con una segunda conceptualización de alteridad imaginaria, real y emergente. Esta última se alimenta sustantivamente, en el caso que nos ocupa, del saber y la práctica psicoanalíticos. Ese saber y esa práctica tendrán como primordial campo de destino la vida al interior del grupo Socialisme ou Barbarie y -por su conducto-, la cultura política de la izquierda en la Francia de la segunda mitad del S. XX. Ese abordaje trae consigo la formulación de una original noción del elemento imaginario a partir de la crítica del fenómeno burocrático y gracias a la aplicación primera de la noción de transferencia institucional. La practica institucional que tendrá su culmine en el acto de auto-disolución, va a derivar en un esfuerzo mayúsculo por Castoriadis, para formular su novedosa noción de institución de la sociedad, fuertemente tributaria del elemento imaginario como instancia no determinada. Un segundo nivel sucesivo, a partir de la segunda mitad del capítulo 4°, va a abordar lo social histórico que se auto-altera explícitamente. Expongo enseguida el análisis por Castoriadis de la manera como la sociedad heterónoma oculta los procesos de auto-alteración. El paso sucesivo, mas del orden de la proyección, va a abordar las implicaciones que el proyecto de sociedad autónoma conlleva respecto a la alteridad en los terrenos de la educación-formación, el psicoanálisis y la política. El aporte de la sociología clínica y del análisis institucional, como propuestas que extienden, en un nivel intermedio de abstracción, la noción de alteridad y sus herederas la noción de imaginario e institución en Castoriadis, será igualmente de primer orden en este pasaje. Pensar en la posibilidad de que la sociedad ejerza el infra-poder como facultad de un colectivo anónimo y que dicho ejercicio se lleve a cabo en los límites del espacio público-privado, el ágora, y el espacio propiamente político, la eclesia, nos dará la pauta para relanzar la noción de transferencia para el caso de la esfera propiamente política. La realidad factual de dicho estado transferencial respecto a la institución, ilustrado por las figuras de representantes y expertos, va a permitirnos cerrar el texto con el carácter mítico de la institución que se desprende aquí del dominio racional como significación imaginaria social y su materialización en el fenómeno burocrático. Sera pues la nueva relación entre instancias lo que irá definiendo en la trayectoria de nuestro autor, la posibilidad de que -dando la espalda a toda teleología-, hablemos de un estado social, nada universal por cierto, que concede la posibilidad de reconocer la alteridad y de aprender a vivir con ella. Estado social que, usando la propuesta por Freud, al reconocer la muerte como desaparición total del sentido, se abre a la vida.