Relación entre el estado del hierro y el remodelado óseo y efectos metabólicos del consumo de un alimento fortificado con hierro y vitamina D en mujeres con predisposición a anemia

  1. Toxqui Abascal, Laura
Dirigida por:
  1. María Pilar Vaquero Rodrigo Directora
  2. Ana María Pérez Granados Director/a

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 28 de febrero de 2014

Tribunal:
  1. Francisco José Sánchez-Muniz Presidente
  2. Ángeles Carbajal Azcona Secretaria
  3. A. Montero Bravo Vocal
  4. R. Blanco Rojo Vocal
  5. Concepción de la Piedra Gordo Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 119979 DIALNET

Resumen

El hierro y la vitamina D son dos micronutrientes esenciales para la vida. Por un lado, el hierro participa en múltiples procesos metabólicos, ya que se encuentra formando parte de enzimas y otros complejos moleculares; y por el otro, la vitamina D incrementa la absorción de calcio y fósforo, manteniendo también su equilibrio en el organismo y desempeñando un papel crucial en la salud ósea. Esta Tesis Doctoral se centra en el estudio de la relación entre el estado del hierro y el metabolismo óseo y en la valoración del consumo de un alimento fortificado con hierro y vitamina D, respecto al mismo fortificado sólo con hierro, sobre el metabolismo del hierro, el metabolismo óseo y otros biomarcadores, en mujeres jóvenes. Para ello, se realizaron estudios de asociaciones entre los marcadores del estado de hierro y los del remodelado óseo, la 25-hidroxivitamina D (25OHD) y la parathormora, en 165 mujeres sanas caracterizadas por sus almacenes de hierro. También se valoró la ingesta de alimentos, energía y nutrientes de estas mujeres, y se estimaron sus pérdidas menstruales, relacionando todo ello con su estado de hierro. Además, se realizó un ensayo aleatorizado, controlado, doble ciego en las que presentaban riesgo de anemia (ferritina sérica < 30 ng/mL), distribuidas en dos grupos paralelos, y se valoraron los efectos del consumo durante 16 semanas, como parte de la dieta habitual, de una bebida láctea fortificada con hierro o con hierro y vitamina D, sobre el metabolismo del hierro, el metabolismo óseo, el perfil lipídico, la glucosa y la presión arterial. Los resultados obtenidos indican que la deficiencia de hierro está relacionada con un aumento del remodelado óseo en estas mujeres, encontrándose asociaciones negativas entre la ferritina sérica y el marcador de resorción ósea, NTx; y entre la transferrina, principal transportador de hierro que aumenta en situación de deficiencia, y el marcador de formación ósea, P1NP. Además, las mujeres con riesgo de anemia, presentaron valores de NTx casi tres veces más elevados respecto a las mujeres sin riesgo. Por otro lado, todas las voluntarias, independientemente de su estado de hierro, mostraron una ingesta de energía, macronutrientes y micronutrientes similar. Sin embargo, el consumo de carne roja fue más alto en las mujeres con mejor estado de hierro, y constituyó el factor dietético más importante relacionado con la ferritina sérica. En relación a la estimación de las pérdidas menstruales, se diseñó un cuestionario, a partir del cual se calculó un score (MBL-score). Se demostró la alta reproducibilidad del MBL-score y que dicho score fue superior en aquellas mujeres que presentaban mayores pérdidas menstruales e inferiores almacenes corporales de hierro. Tras la intervención nutricional, se obtuvo que el consumo de las bebidas lácteas fortificadas con hierro no mejoró el estado de hierro de las voluntarias, a pesar de haberse elegido la forma microencapsulada de hierro para la fortificación del alimento. Sin embargo, la fortificación con vitamina D condicionó una leve mejora en algunos parámetros hematológicos (eritrocitos, hematocrito y hemoglobina en la semana 8). Respecto al metabolismo óseo, se encontró que las voluntarias presentaron una alta prevalencia de deficiencia o insuficiencia de vitamina D, siendo en el 76% de ellas los niveles de 25OHD inferiores a 75 nmol/L ( < 30 ng/mL). El consumo de la bebida láctea fortificada con vitamina D fue capaz de aumentar las concentraciones de 25OHD hasta niveles cercanos a la concentración óptima, y se constató que el remodelado óseo se redujo significativamente. En cuanto a los resultados obtenidos en relación a los lípidos séricos y la presión arterial, se obtuvo que el estado de la vitamina D se relacionó inversamente con el colesterol total y el LDL-colesterol, y que la intervención con la vitamina D, frente a su placebo, ocasionó una disminución de la presión arterial sistólica y diastólica en estas mujeres.