Bioestratigrafía del Silúrico de la Zona Centroibérica meridional

Resumen

Se analiza la bioestratigrafía de la sucesión silúrica de un área muy amplia del Macizo Ibérico, que abarca el sector español de la Zona Centroibérica meridional, incluyendo la banda limítrofe con la Zona de Ossa-Morena (Dominio Obejo-Valsequillo o "Zona Lusitano-Mariánica"). La sucesión silúrica surcentroibérica se caracteriza por tres unidades detríticas sucesivas que, de más antigua a más moderna, son: a) areniscas y cuarcitas del techo del Ordovícico a base del Silúrico, de espesor métrico a decamétrico (= Formación Cuarcita del Criadero, ausentes localmente); b) pizarras negras graptolíticas (= Formación Guadarranquejo, 10-150 m); c) alternancias de pizarras negras, limolitas, areniscas y cuarcitas, en ocasiones con intercalaciones de rocas ígneas, en las que se situaría el límite Silúrico-Devónico (de 200-400 m, a más de 1000 m). La tercera unidad optamos por tratarla informalmente como una "Alternancia de pizarras, areniscas y cuarcitas", cuya edad y adscripción cronoestratigráfica continúa siendo problemática, debido a la casi total ausencia de elementos paleontológicos. Los materiales volcánicos y subvolcánicos en la sucesión silúrica son frecuentes en algunas estructuras (sinclinal de Almadén y Valdeazogues-Puertollano).Los niveles fosilíferos se sitúan esencialmente en las pizarras graptolíticas (Formación Guadarranquejo y equivalentes), seguidos por los yacimientos enclavados en la parte inferior de la unidad de Alternancias arenosas y, de manera muy puntual, por los escasos yacimientos registrados en la Cuarcita del Criadero. En el Dominio Obejo-Valsequillo, la mayoría de los datos bioestratigráficos se limitan a localidades aisladas o secciones de escaso desarrollo, conteniendo las asociaciones fosilíferas más modernas y vinculadas con los únicos materiales calcáreos del Silúrico de la región estudiada.El grupo fósil de mayor interés bioestratigráfico son los graptolitos, de los que se caracterizaron una biozona del Aeroniense, siete del Telychiense, cuatro del Sheinwoodiense, una del Homeriense, una del Ludfordiense y una del Pridoli. En las facies de pizarras graptolíticas del Telychiense-Sheinwoodiense se reconocen también dos biozonas de conodontos.El estudio paleontológico permitió reconocer 126 formas distintas de graptolitos planctónicos. También se abordó la revisión de los numerosos taxones nuevos propuestos para el área por Hernández Sampelayo (1960), llegándose a considerar todos ellos como Graptolithina nomina oblita. Además del estudio de los graptolitos, hemos investigado la paleodiversidad de otros grupos fósiles del Silúrico: artrópodos (euriptéridos, trilobites, filocáridos y ostrácodos), moluscos (cefalópodos, gasterópodos, bivalvos), braquiópodos (rinconeliformes, linguliformes), equinodermos (crinoideos), cnidarios, anélidos (macaeridios), cornulítidos, microfósiles (conodontos) e icnofósiles. De los fósiles de invertebrados no graptolitos, tan sólo una pequeña parte ha podido ser identificada taxonómicamente, detectándose por vez primera para España o la Zona Centroibérica la presencia de especies concretas de braquiópodos, bivalvos y ostrácodos, además de algunos arqueogasterópodos loxonematáceos, neritimorfos y bellerofóntidos pterotecinos. El material de euriptéridos y cefalópodos se describe a nivel tipológico, determinándose la presencia de dos taxones diferentes de pterigótidos, en el primer caso, y de siete morfotipos distintos de ortocerátidos, en el segundo.El registro de graptolitos se adscribe a las biofacies de plataforma somera y epipelágicas de la provincia graptolítica de la Europa Perigondwánica de `torch (1998a). Las asociaciones de bivalvos y braquiópodos del Llandovery-Ludlow son las típicas del área perigondwánica. Las relaciones con otras áreas se estrechan y se hacen más patentes en el Ludlow y Pridoli de los sectores situados al sur del eje de Los Pedroches, donde se depositan los únicos materiales calcáreos silúricos reconocidos en toda el área de trabajo.