Joaquín Dicentasu teatro y el grupo de la gente nueva

Resumen

El teatro de Joaquín Dicenta se centra en un escritor, periodista y dramaturgo tan renombrado y popular en vida como ignorado tras su muerte hace ya un siglo, aunque en los últimos años la editorial Renacimiento haya recuperado sus crónicas de viaje y Larumbe sus textos biográficos: la novela Encarnación y el sucinto relato Idos y muertos. Esta investigación aborda, bajo una nueva perspectiva, su vida y obra teatral; pretende también ofrecer una visión distinta sobre un autor considerado caduco, centrado en las temáticas sociales o el melodrama ibérico. Se estructura en cinco partes. En la introducción, tras fijar los objetivos, fuentes y metodología, se consignan todos los estudios publicados relativos a su vida y obra para constatar la polarización de la crítica en torno al debate (o la afirmación) de si su teatro era social o no; y que ha servido para establecer el estado de la cuestión y plantear las correspondientes hipótesis de trabajo. En la primera parte se aborda su biografía, para deslindar el mito y el tópico del escritor borracho, integrando datos inéditos sobre antecedentes familiares procedentes de una variada documentación (expedientes personales, hojas de servicio, partidas bautismales, correspondencia, conversaciones personales con familiares etc.), recopilada por su nieto José Fernando Dicenta (1929-1984) y Ada del Moral, y se finaliza con un estudio sobre la generación o el grupo Gente Nueva, prestando especial atención al marco histórico donde surge, sus interrelaciones y ambiciones de convertirse en un grupo de presión, su aportación al periodismo moderno y su visión de la bohemia; sin olvidar sus diferencias con la Generación del 98 y sus concomitancias con las ideologías de la llamada crisis finisecular en la Europa del siglo XIX. En la segunda parte se analiza la recepción del realismo en España, el influjo de Zola, Hauptmann o Ibsen, entre otros, para situar a Dicenta dentro del teatro realista, destacar su afinidad con el neorromanticismo, naturalismo, simbolismo y el papel que jugó en la modernización del lenguaje escénico; después, a partir de la premisa que defendía acerca de la función social del teatro como elemento educador, se tratan las relaciones entre educación, propaganda y teatro social, sin eludir otra de sus funciones básicas: entretener y divertir. La tercera parte se focaliza en el estudio de los personajes femeninos de su teatro, a través de la perspectiva de género y la lucha de clases. La cuarta parte se centra en el estudio de su producción dramática, treinta y dos obras que permiten comprobar su evolución ideológica y dramatúrgica y, al tiempo, aportar numerosos datos sobre los teatros donde se estrenaron, las compañías que representaron las piezas e incluso los relatos donde se inspiró, fruto de su labor como «proto» periodista de investigación. La quinta parte aborda sus aportaciones al lenguaje escénico en el contexto de su época y procura unas pinceladas al respecto que completa un apéndice gráfico. El trabajo se cierra tras señalar sus aportaciones a la figura y la obra de Joaquín Dicenta que permiten situarle mejor en su contexto literario, político y social y destacar sus singularidades sin caer en ucronismos, leyendas negras y hagiografías que han oscurecido a una figura singular de nuestro universo cultural.