La formación integral en el ámbito universitarioun estudio empírico sobre la importancia de los valores y las actitudes ético-profesionales

Résumé

Introducción. La universidad es una institución que tiene como misión transmitir conocimientos teóricos, enseñar habilidades prácticas, potenciar la investigación, cultivar el espíritu, orientar el quehacer docente-investigador y personal, hacía la búsqueda de la Verdad y del Bien. Por ello la formación tiene que dotar de conocimientos, habilidades, actitudes y valores que conformen al estudiante como un buen profesional. Profesional, que es capaz de conocer, comprender, reflexionar y analizar sus actos. Para ello, la universidad, entre las materias que imparte, cuenta con disciplinas como la Ética que se dirigen a ello. A lo largo de esta tesis doctoral, se aportarán evidencias empíricas sobre la importancia de 1) la formación integral, de 2) los valores personales y profesionales y 3) las actitudes ético-profesionales, en función del tipo de formación que se recibe, del curso y del sexo. Método. Para llevar a cabo esta investigación, se empleó una metodología mixta. El diseño de investigación fue transversal, ex post facto, prospectivo, correlacional. La muestra quedó compuesta por 693 universitarios seleccionados a través de un muestro no probabilístico incidental. Para la medición de las variables se crearon tres escalas ad hoc. Resultados. Las tres escalas fueron validadas presentando una adecuada consistencia interna y bondad de ajuste. En cuanto a los resultados fundamentales se observó que tal y como se esperaba, los alumnos que reciben formación específica de carácter humanístico presentaron mejores resultados en: 1) la importancia de la formación integral en el ámbito universitario; 2) la valoración de la formación integral recibida en la universidad; 3) los conocimientos de los fundamentos sociales y éticos de la profesión; 4) la importancia otorgada por el entorno universitario a la formación integral; 5) la importancia otorgada a la formación técnica; 6) la importancia de los valores personales y profesionales; 6) la importancia de valores vinculados al cuidado de las relaciones sociales; y 7) la capacidad de la formación recibida para enriquecer los valores personales. En cuanto al curso, al contrario de lo esperado, las diferencias apreciadas, se dieron a favor de los alumnos de primer curso. Por último, se pudo afirmar que, las mujeres presentaron puntuaciones superiores a los hombres. De manera cualitativa, se observó que el discurso de profesores y alumnos era complementario. Todos ellos, señalaron importante la formación integral y consideraron que es a través del ejemplo como mejor se enseña y se aprenden los valores personales y profesionales y las actitudes ético-profesionales. Conclusiones. Gracias a este estudio se ha podido comprobar la importancia de dotar a los estudiantes de una formación integral. Esta formación, se da cuando las ciencias y las humanidades dialogan. En segundo lugar, se ha podido justificar la relación entre universidad y valores, considerándose esta institución un espacio que acompaña a los estudiantes en el desarrollo de su conciencia moral. Por último, y en línea con el resultado anterior, la universidad debe ser un espacio que promueve las actitudes ético-profesionales en sus estudiantes. Para ello, la disciplina de la ética, se considera una materia transversal. Por último, es necesario señalar la importancia de los docentes en la trasmisión de valores, ya que son considerados la pieza clave en el proceso de aprendizaje, un ejemplo en el que fijarse y un guía en su proceso de crecimiento personal.